Diari Més

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Mi experiencia, en las diferentes responsabilidades políticas, que he venido desempeñado durante hace años, no me deja duda alguna, la confección de las listas municipales es una de las tareas más arduas de una organización política, por la complejidad en la confección de las mismas. No se trata de hacer una sola lista en una demarcación territorial, generalmente provincial, como pueden ser las elecciones generales o autonómicas, con la salvedad de las europeas, cuyo ámbito se circunscribe en todo el territorio español. Son muchos los municipios que despiertan el interés de partidos políticos, con el único fin de presentar sus siglas en una papeleta de votación municipal.

Cada demarcación electoral provincial, cuenta con un destacado número de municipios, objetivo todos ellos, para presentar las formaciones políticas, una candidatura municipal, algunos con mucha más facilidad que otros, dependiendo de su implantación o estructura territorial. Son los partidos independentistas de ERC y JxC, los que más implantación tienen en todo el territorio catalán, concretamente en la Cataluña interior, mientras formaciones políticas como el PP y PSC, se centran más en núcleos urbanos con una gran población. La finalidad, conseguir el máximo posible de listas municipales, ya sea en la cobertura de municipios o del censo poblacional, si es en los dos casos mucho mejor.

Las dificultades surgen en dos casos de actuación diferentes, pero al mismo tiempo complementarios, hacer una lista municipal. Uno de ellos, hace referencia a las poblaciones, donde ya existe implantación política, en la mayoría de los casos con concejales y quizás alcaldes, el otro caso, donde no existe estructura política alguna.

En el primer caso, puede suceder que el candidato a la alcaldía ya este consolidado, no existiendo ningún tipo de debate interno en su continuidad, fruto del buen trabajo realizado en su propio municipio, garantizando así un buen resultado en las urnas. Cuando se presenta un cambio de candidato puede responder a un cambio generacional o bien, aún nuevo candidato consensuado y en el peor de los casos, a conflictos internos de la propia organización política, estos últimos, son los que más desgastan a las propias organizaciones políticas y cuando no, puede afectar a los resultados electorales, dicha situación no tan solo se centra en quien será el cabeza de lista, sino también, a los posibles interesados en formar parte de ellas.

El segundo caso, no es nada fácil, es confeccionar una lista municipal, en aquellos municipios donde no existe implantación de la formación política, lo que en la jerga política denominamos «tierra de misiones», es decir, conseguir contactar con algún vecino para convencerle que, sea capaz de liderar un proyecto municipal bajo las siglas de un partido político, dificultad que se incrementa en los municipios menos poblados. Esta delicada situación, se produce, en la mayoría de los casos, por una escasa presencia política, en zonas rurales los doce meses del año y no, acordándose que existen, cada cuatro años, precisamente cuando llegan las elecciones municipales. Es aquí, donde se conocen los dirigentes políticos o cargos electos, que son capaces de compatibilizar las zonas de confort político, con la dura realidad del territorio, aquellos que cuando en sedes parlamentarias se refieren a un municipio, no necesitan consultar el Google o bien, son capaces de estar pisando un plato de TV o emisora de radio, para pisar también, la plaza o calle de cualquier municipio por muy pequeño que sea.

Si tengo que ser sincero, en todo este quehacer en gestar listas municipales, hay personas que pueden salir perjudicadas, me refiero, las que se quedan fuera de ser candidatos o de las listas electorales, algunas lo aceptan con resignación, pero comprometidos con el proyecto de su partido, ayudando en conseguir el mejor resultado posible, dando lo mejor de ellos mismos, verdaderos ejemplos de generosidad, unidad y no enfrentamientos, a otros, les puede más su ego personal o enfado, no dudando en un cambio de patrocinio político, es ahí, donde algunas emergentes formaciones políticas, encuentran una cantera que les pueda facilitar algunas que otras listas electorales. Quedan pocos días para cerrar listas y centrarse en lo que es la propia campaña electoral, sin perder de vista, la afectación de estas en lo que será el resultado de las cercanas elecciones generales y como tal el próximo gobierno de España.

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