Un paciente con el 95% del cuerpo quemado se salva gracias a la piel de su hermano gemelo
«Es la primera vez que se injerta el 95% de una piel quemada, es un trasplante casi total», se felicitó el cirujano
Un hombre que se había quemado un 95% del cuerpo en un accidente laboral, pudo salvar la vida gracias a un injerto de piel de su hermano gemelo, una primicia médica mundial que se realizó en el hospital Saint Louis de París.
Gracias a esta intervención, el paciente no sufrió ningún tipo de rechazo del injerto, como pasa con la de cualquier otra persona, indicó el equipo médico que llevó a cabo las intervenciones, liderado por el profesor en cirugía plástica y reconstructiva Maurice Mimoun, y por el especialista en anestesia y reanimación Alexandre Mebaza. Como los gemelos salen del mismo cigoto, comparten ADN, lo cual permite evitar este rechazo, destacó Mimoun, «Es como si se tuviera un depósito de piel a disposición». «Es la primera vez que se injerta el 95% de una piel quemada, es un trasplante casi total», se felicitó el cirujano.
Los hechos se remontan a hace un poco más de un año, cuando Franck, de 33 años, sufrió quemaduras que afectaron la casi totalidad de su cuerpo -incluida la cara- con la sola excepción de una parte de los pies y de la cadera. Su hermano Éric se propuso rápidamente como donante y entonces arrancó el procedimiento. Se le extrajo en varias ocasiones piel del cuero cabelludo porque en esta parte del cuerpo no queda marca y cicatriza rápidamente, pero como no era suficiente, también de la espalda y de las piernas, hasta un 50% de su cuerpo.
El paciente estuvo cuatro meses bajo cuidados especializados en el centro de quemados del hospital Saint Louis, pero pudo volver a casa, puede caminar y la rehabilitación continúa.