«La capacidad de Ballesteros es dejar a todo el mundo descontento. No hay ningún sector en Tarragona que esté satisfecho»

El hijo del exalcalde, Joan Miquel Nadal, se pone al frente de la formación del PDeCat en el Ayuntamiento como portavoz después de la muerte de Albert Abelló, el pasado 20 de diciembre. Navidad que es consciente de que el nombre de su padre marcará el inicio de su carrera política toma esta responsabilidad con valentía y espera recuperar «la autoestima perdida» de la ciudad, según explica.

-Su padre, Joan Miquel, ha sido dirigente de Convergencia, ganó cuatro elecciones municipales –en dos por mayoría absoluta–, su abuelo Rafael militó en el PSUC y fue senador por el PSC y un bisabuelo también fue político. ¿Porque ha decidido continuar con la estirpe política?

-En mi casa siempre hemos sido animales políticos. Nos gusta. Ante las tristes circunstancias que han tenido lugar, sentí que esta posibilidad me venía a buscar. No podía decir que no y la verdad estoy orgulloso.

-Su padre fue fundador de CDC en Tarragona y Usted milita en el PDeCAT. ¿Qué diferencia hay entre la Convergencia de Jordi Pujol y el Partido Demócrata de Carles Puigdemont?

-Hay muchísimas. CDC ha sido un partido que durante muchos años ha recogido el anhelo del pueblo catalán pero con el tiempo, ciertas estructuras de partido estaban conquistadas. El PDeCat es la respuesta a este enquistamiento. Una parte de la militancia del PDeCat quiere dar respuesta a los errores cometidos de CiU. Somos un partido joven, creado con un proceso participativo, legítimo y transparente. Yo viví la fundación y para ser sincero no se hablaba de CIU. La naturaleza de PDeCAT y CiU son completamente diferentes. Estamos orgullosos del nuevo partido que se ha creado.

-Qué consejos le ha dotado su padre, ahora que accede al Ayuntamiento como concejal?

-Él se comprometió a no intervenir en la decisión de que tenía que tomar cuando me lo propusieron pero una vez tomé la decisión se alegró muchísimo. Sí que he recibido consejos de él estos días y los valoro porque que, para mí ha sido el mejor alcalde de Tarragona, pero queremos mantener la inocencia de vivir las cosas por primera vez, eso nos da valentía. Una de nuestras virtudes es la juventud y y que ninguno de nosotros ha estado en política. Eso nos rearma para afrontar esta nueva etapa.

-Usted iba en el puesto decimoquinto de la lista, como tiene que entender que todos los miembros de la lista que estaban por delante de Usted hayan renunciado a ser concejales ?

-En realidad no es exactamente así, la lista tenía miembros de Unió y también independientes. Se constituyeron estas listas por unos motivos muy particulares que ahora han dejado de existir. Ahora queríamos recuperar militantes del partido. En realidad éramos cuatro. Se consideró que Irene Mallol y yo éramos las personas más adecuadas para encabezar el proyecto.

-Su padre sorprendió a todo el mundo a CiU, ya hace unos años, cuando se declaró independentista. Poca gente se lo esperaban. ¿Usted, desde cuando es independentista, si es que lo es?

-Desde de siempre y hasta el 2007 aproximadamente entendía que la cultura catalana podía defenderse dentro del Estado Español. Sin embargo, a partir del inicio del proceso estatutario empecé a cambiar mi sentimiento. Lo viví como una cosa totalmente denigrante. La sensación que tuve es se reían de nosotros. Yo como abogado, defiendo que el pueblo de Cataluña tenga el derecho a realizar un referéndum. Ahora votaría sí a la independencia. La respuesta al anhelo de los millones de personas que quieren la independencia de Cataluña ha sido judicial y de persecución. Ahora hemos sabido a través del Ministro de Interior Zoido que el coste total del operativo fue de 87 MEUR. Todo este dinero para dar respuesta a un tema completamente administrativo. Si España hubiera propuesto ventanas de salida a la gestión del problema no habríamos llegado a este punto y se podría haber encontrado una solución satisfactoria para todo el mundo.

- ¿Cómo vivió el 1-0?

- Estuve en todos los colegios electorales y vi cómo nos ponían contra la pared. En Campo Claro me dieron una patada que todavía tengo marcada. También lo viví en Sant Salvador y en Sant Pere y San Pau. Fue ridículo. Aquel día me identificaron tres veces.

-Gente que votó a Joan Miquel Nadal como alcalde y otros que no lo hicieron dicen que su padre transformó y modernizó la ciudad. ¿Cómo define la Tarragona actual?

-Yo siempre había entendido la política como el arte de dejar contentos a unos y descontentos a otros. La capacidad de Ballesteros es dejar a todo el mundo descontento. No hay ningún sector en Tarragona que esté satisfecho. Ni los pequeños proyectos se sacan adelante ni los grandes --que llevan un paro de diez años-. Creo que la gestión que se está haciendo de todos los proyectos ha provocado que desde 2007 haya caído la autoestima de los ciudadanos. Es trabajo del resto de políticos abrir los ojos a la gente. La falta de autoestima provoca un estado de perpetua conformidad en nuestra ciudad. Hay que revertir ya esta situación.

-Como político, cuál son los proyectos que Tarragona tendría que salir adelante, pensando en la ciudad del futuro?

-Creo que se tiene que tejer Tarragona. La cohesión de toda la ciudad es prioritaria y va en diferentes vertientes. Más allá de los Juegos del Mediterráneo se necesitan instalaciones que redunden en beneficio de la vida de los tarraconenses. ¿Ballesteros decía que quería cohesionar los barrios y qué se ha hecho? A nivel urbanístico no se ha hecho nada. Hay que hacer espacios. La solución para cohesionar los barrios no puede venir sólo para construir bloques de pisos. Hay que resolver los grandes proyectos que están en fase administrativa. Siempre hay excusas para sacarlos adelante y ya es suficiente.

- ¿Desde su partido, aseguran que Usted hará una oposición más dura, como se traducirá?

-Sí haré una oposición dura con respecto a todo aquello que afecte directamente a las condiciones de vida de los ciudadanos.

-¿Qué piensa del proyecto de la Budallera?

-Creo que Tarragona se tiene que cohesionar. El proyecto me parece bien. Ya se ha revisado por la Generalitat y todo el mundo ha podido hacer alegaciones. Hacen falta viviendas y Tarragona necesita crecer. Creo que es un proyecto respetuoso con la Anilla Verde pero igualmente hace falta una conciliación de las partes implicadas. Es importante también tener en cuenta la vertiente social.

- ¿Además de la Isla Corsini que Albert Abelló quería potenciar, hay algún proyecto que quiera sea su insignia?

-Pienso que una vez recuperamos la autoestima de la ciudad, recuperaremos muchos proyectos. A nivel de barrios, se tienen que mejorar arreglos e instalaciones. Por supuesto, hay que resolver los grandes proyectos que tenemos pendiente como la Tabacalera o el Banco de España. Aparte de eso, me gustaría que la ciudad abriera sus puertas al mar. Estamos viviendo de espalda al mar y habría que potenciar esta vertiente.

- ¿La pasarela Puerto - Ciudad le parece una buena solución?

-Es una solución porque nos permitirá cruzar y acercarnos en el mar pero cada vez que ponemos un parche estamos más lejos de la fachada marítima que se merece la ciudad.

-Por cierto, construir el parking Jaime I fue una decisión del gobierno municipal que presidía su padre. ¿Qué tiene que hacer Tarragona con esta obra faraónica, hasta ahora inútil, que cuesta un dineral en las arcas municipales?

-En diez años no se ha hecho nada absolutamente. En 2015 se hizo una consulta ciudadano y no han cumplido nada. En diez años cómo puede ser que no se haya hecho nada. Creo que efectivamente hace falta un aparcamiento convencional, necesario en la Parte Alta pero también la Casa de la Fiesta. No entiendo que la respuesta hasta ahora haya sido tenerlo todo paral·litzat.