La Guardia Civil dice en el Supremo que los líderes independentistas actuaban como «la delincuencia organizada»

La Guardia Civil cree que toda la planificación independentista se llevó a cabo con «tácticas propias de la delincuencia organizada», ya que no se quería que se hiciera público ningún detalle de la planificación ni el funcionamiento de los órganos de coordinación del plan. Este supuesto secretismo también se vio en las conversaciones telefónicas con lenguaje críptico o los encuentros discretos entre los líderes secesionistas, algunos de los cuales fueron vigilados por la Guardia Civil. De hecho, un informe entregado al magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena constata que varios altos cargos siguieron medidas de seguridad y contra vigilancia seguramente aconsejados por Mossos d'Esquadra y altos cargos de interior.

Uno de los objetivos del movimiento independentista, según el informe en el cual ha tenido acceso la ACN, era tener movilizada la ciudadanía, y por eso considera «clave» la comunicación a través de medios de comunicación «públicos y privados», entre los que considera «elemento capital» la participación de Jaume Roures, dueño de Mediapro. Así, considera que la cúpula independentista «preparó a sus seguidores para un conflicto político, social y económico que lejos de rehuir contemplaban generar, gestionar y ganar, valiéndose en todo momento de una maquinaria incansable de propaganda institucional».

De hecho, la movilización popular, dice la Guardia Civil, habría permitido evitar, según las conversaciones telefónicas interceptadas, que los cuerpos policiales españoles detuvieran a Carles Puigdemont y Oriol Junqueras antes del mismo 1 de octubre.

Según la Guardia Civil, la agenda 'Moleskine' de Josep Maria Jové, interceptada a su casa y con anotaciones de febrero del 2015 a noviembre del 2016, fueron un «reflejo efectivo» de la estrategia de desconexión «previamente diseñada y plasmada en el documento 'EnfoCATs', también de Jové y que se habría redactado el verano del 2016. Esta estrategia contaría con un periodo de transición nacional y otro de consecución y gestión de la independencia, con tres etapas: preparación del nuevo estado, reconocimiento internacional y despliegue de las estructuras de estado. «Su posición iba mucho más allá de simple observador, y sus opiniones e ideas fueron valoradas por los miembros del Ejecutivo y del partido», concluye el informe.

También se acusa Jové de participar en negociaciones con la CUP donde se definía una estrategia, obligada por los cupaires dice la Guardia Civil, de «desconexión, ruptura y desobediencia». Tan importante se supone que es el papel de Jové que lo sitúan en una reunión con otros dirigentes independentistas, como Marta Rovira, el 29 de julio del 2015, poco después de la presentación de la candidatura de JxSí donde ya se negocia el futuro Gobierno. «Las anotaciones que realizó tuvieron un fiel reflejo en la composición final del Ejecutivo», asegura el informe. También lo sitúan en una reunión con Jordi Turull y Lluís Corominas para pactar que Joan Josep Nuet fuera el miembro de CSQP en la Mesa del Parlamento.

Entre las estructuras de estado diseñadas por los líderes políticos, dice la Guardia Civil, hay los Mossos, el CTTI, el ejército, el sistema educativo, las infraestructuras básicas esenciales, la Seguridad Social, la hacienda propia o el poder judicial. Todo eso, conformaba el «cóctel ideal» para forzar la desconexión. Incluso, Jové llegó a decir por teléfono que los Mossos «obedecerían las leyes del Gobierno catalán y que se debían a este Gobierno antes que al juez o a España», aunque la Guardia Civil recuerda que los principios de actuación de la policía catalana incluyen la defensa de la Constitución, el Estatuto y el ordenamiento jurídico.

Sobre el CTTI, se concluye que recibió dinero de los departamentos de Economía, Asuntos Sociales y Justicia, muy controlados por ERC, porque había que recopilar megadatos para las necesidades operativas de las estructuras de estado. Pero algunos proyectos del CTTI «cruzaban la línea», según algunos cargos del organismo.

Incluso, la Guardia Civil da a Jové un papel relevante en la localización de naves industriales como las de Bigues i Riells, donde la Guardia Civil decomisó millones de papeletas, o la gestión de los colegios electorales, que apalabró con el conseller de Salud, Antoni Comín.

El informe, de 176 páginas incluye diez anexos con noticias de prensa, una carta d'Ada Colau en Puigdemont i Junqueras, correos electrónicos intervenidos a Josep Lluís Salvadó y el documental '1-O' elaborado por Mediapro y emitido por TV-3, así como numerosas llamadas telefónicas intervenidas.