UP reclama que los campesinos puedan vender directamente leche cruda, aves de corral y conejos

Unió de Pagesos ha presentado unas enmiendas a un proyecto de Reial decreto en el Ministerio de Sanidad para pedir más flexibilidad en las normas de higiene de los alimentos cuando el productor suministra directamente pequeñas cantidades de productos primarios al consumidor final o a establecimientos locales de venta al detalle.

En este contexto, el sindicato, a través de Unión de Unions, ha reclamado una vez más que se autorice la venta directa de leche cruda a las explotaciones de producción, de la misma manera que hace años se legalizó a muchos estados de la Unión Europea (UE), como Francia e Italia.

También pide que se autorice la venta y el sacrificio de aves de corral y de conejos en pequeños mataderos situados en las mismas explotaciones para la venta directa. Con respecto a los pequeños mataderos de explotaciones de ovinos o de otras especies en sistema extensivo o semiintensivo, Unió de Pagesos solicita que también se puedan sacrificar los animales de las explotaciones próximas, dentro de un determinado radio.

La regulación comunitaria en materia de seguridad alimenticia fue establecida entre el 2002 y el 2004, y, aunque no incluía el suministro directo por parte del productor de pequeñas cantidades de productos primarios al consumidor final, o a establecimientos locales de venta al detalle, instaba a los estados miembros de la UE a regularlo según el derecho de cada país.

El Estado español publicó en el 2006 el Real Decreto 640/2006, que ahora quiere modificar, pero Unió de Pagesos considera que tanto aquella regulación como los cambios que tiene previsto incluir el nuevo proyecto de Reial decreto resultan insuficientes. El proyecto valora positivamente en su preámbulo las condiciones higiénicas y de control de la producción primaria existentes, pero esta valoración no se traduce suficientemente en una flexibilización de las normas para la venta directa.

Según el sindicato, los productores sufren las consecuencias de estas limitaciones normativas, ya que no le permiten obtener de manera suficiente el margen comercial correspondiente en venta directa de una parte de su producción, a nivel local, que de forma legítima le correspondería para mejorar el nivel de renta. Además, comporta un agravio para los productores con respecto a los de los países comunitarios, en los cuales la venta directa ha sido regulada sobradamente y ya es una práctica muy común.