Borràs, Mundó y Vila no declaran ante Llarena, que les notifica su procesamiento

Los consellers destituidos Meritxell Borràs y Carles Mundó y el exconseller Santi Vila ya han comparecido ante el juez Llarena en una vista muy breve donde les ha comunicado formalmente su procesamiento y donde ninguno de los tres ha querido declarar. El juez del Supremo los procesa por desobediencia y malversación. A diferencia de los consellers destituidos encarcelados, que comparecieron en abril, ellos han optado por no decir nada ante el juez durante las declaraciones indagatorias y sólo se han limitado a no reconocer los hechos por los cuales los procesa y se han remitido a los recursos interpuestos. En el momento de procesarlos, el pasado 23 de marzo, Llarena destacó de los tres que desatendieron los requerimientos del Tribunal Constitucional cuando aprobaron la Ley del referéndum. También considera que autorizaron en los diferentes departamentos «acciones y contrataciones necesarias para la celebración del 1-O» y que lo hicieron usando fuentes públicas.

En la salida de las declaraciones, ni Borràs ni Mundó han querido hacer declaraciones. Sí ha hablado el abogado de la consellera destituida de Gobernación, Xavier Melero. El letrado ha explicado que los miembros del antiguo Gobierno no han declarado y no han añadido nada de nuevo, y que simplemente se han remitido a los recursos que tienen presentados contra los autos de procesamiento. «Normalmente en este trámite nunca se declara, y han seguido esta línea lógica», ha manifestado.

Fuentes presentes en la declaración de Carles Mundó han detallado que ha sido muy breve y que el conseller destituido de Justicia sólo ha expresado su desacuerdo con el auto de procesamiento y ha defendido que no ha cometido ningún delito.

En cambio, a la salida, el exconseller Santi Vila (que dimitió horas antes de la votación de la declaración de independencia) ha asegurado que ha defendido ante el juez que ni él ni ningún miembro del Gobierno gastó «ni un solo euro» en la organización del 1-O. Fuentes presentes en la declaración, sin embargo, han asegurado que Vila no se ha manifestado en estos términos.

La cuarta encausada que ha comparecido este martes ha sido la portavoz del secretariado nacional y expresidenta del grupo parlamentario de la CUP, Mireia Boya, que ha criticado el proceso judicial delante de Llarena, le ha dicho que la sentencia «ya estaba escrita» y que el «juicio de verdad lo harán instancias internacionales».

Consellers en libertad provisional

Los exconsejeros destituidos Meritxell Borràs y Carles Mundó estuvieron un mes en la prisión por orden de la magistrada de la Audiencia Nacional Carmen Lamela y salieron en libertad bajo fianza el pasado 4 de diciembre. La decisión la tomó entonces el juez instructor del Supremo Pablo Llarena, una vez la causa contra el Gobierno pasó de la Audiencia Nacional al Supremo. El juez fijó una fianza de 100.000 euros de fianza para cada uno de ellos.

En el caso del exconseller Santi Vila, sólo pasó una noche en la prisión en noviembre mientras abonaba los 50.000 euros de fianza fijados, en aquel momento, por la magistrada de la Audiencia Nacional Carmen Lamela. Desde entonces, los tres están en libertad provisional. En este caso, y a diferencia de las indagatorias del lunes con los exmiembros soberanistas de la Mesa, ninguno de los encausados ha pedido que se levanten las medidas cautelares que pesan sobre ellos.

En el caso de Boya, declaró el pasado febrero ante el juez Llarena, que la dejó libre sin cautelares.