La víctima de 'la Manada' pide en una carta denunciar las agresiones sexuales
La chica agradece el apoyo recibido y lamenta la «mentalidad de una sociedad dónde eso le puede pasar a cualquiera»
La víctima de 'la Manada' ha roto el silencio y ha enviado una carta al programa 'Ana Rosa', en Telecinco, donde agradece todo el apoyo recibido desde que denunció la violación. La víctima ha animado a todo el mundo a denunciar cualquier agresión sexual, a pesar de pensar que no los creerán. «No os quedéis callados, porque si lo hacéis los estáis dejando ganar a ellos», ha escrito la chica. A pesar de agradecer todo el apoyo recibido - «gracias a la gente que, sin conocerme, me dio la voz cuando muchos me la quisieron quitar», escribe- también lamenta que es «indecente» bromear de una violación y alerta que en una sociedad con esta mentalidad «eso le puede pasar a cualquiera». «Denunciad, nadie tiene que pasar por eso, nadie se tiene que lamentar por beber, hablar con gente, volver sola a casa o llevar minifalda», relata la chica, que pide también dar un paso más allá de condenar los hechos y «ser partícipes del cambio». «Personalmente, que mi caso haya removido la conciencia de una persona o haya dado fuerzas a otra persona para luchar ya me doy por satisfecha», reflexiona.
De la víctima de 'la Manada' no se conoce ni el nombre, ni su rostro y siempre ha sido protegida durante todo el procedimiento judicial. Ahora que ya hay sentencia y que la Audiencia de Navarra ha dejado en libertad provisional a sus agresores (ya que la sentencia no es firme), la chica ha enviado una carta al programa de Ana Rosa donde, sobre todo, agradece el apoyo de su entorno y de todos aquellos que se han tirado en las calles para denunciar su situación.
También aprovecha la carta para pedir a «mujeres, hombres, niñas y niños» que pasen por una situación similar que denuncien, aunque piensen que no los creerán. Recuerda que si ella no lo hubiera hecho, la sociedad no habría hecho la reflexión que ha hecho a raíz de su caso.
Además, apuesta por impulsar un cambio de mentalidad en la sociedad. «Igual que no bromeamos con enfermedades, no podemos bromear con una violación, es indecente y está en nuestras manos cambiarlo», recopila en la carta. Además, pide a la gente que «piense antes de hablar» y juzgarla.