Llarena responde al gobierno español que ha acabado la instrucción y deja vía libre al traslado de los presos en Cataluña
Fuentes del ministerio del Interior aseguran que el juez les ha comunicado que no tiene que practicar más diligencias
El juez instructor del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha comunicado al gobierno español que ha finalizado la instrucción y que no tiene que practicar más diligencias, según apuntan a la ACN fuentes del Ministerio del Interior. Eso deja vía libre al gobierno de Pedro Sánchez para sacar adelante el protocolo para trasladar a los presos a Cataluña. El ejecutivo español ha iniciado los trámites para efectuar los traslados y lo primero que ha hecho es preguntar al juez que instruye la causa si ha finalizado la instrucción. Según estas fuentes, el magistrado ha dicho que su tarea al frente de la instrucción ya ha acabado. Sin embargo, el juez Llarena todavía no ha dictado el auto de conclusión del sumario, el documento que formalmente cierra la instrucción y que envía la causa a la sala para que abra juicio oral. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ya afirmó el miércoles durante la sesión de control que se evaluaría el traslado una vez Llarena hubiera finalizado la instrucción y que se haría para garantizar el derecho a defensa de los presos.
Fuentes del Tribunal Supremo han confirmado que el miércoles recibieron cuatro escritos procedentes de Instituciones Penitenciarias preguntando por la situación procesal de Dolors Bassa, Carme Forcadell, Jordi Cuixart y Jordi Sànchez. Las mismas fuentes afirman que no se han recibido escritos sobre el resto de presos y que Llarena no ha respondido oficialmente nada.
Varias defensas también han solicitado nuevas diligencias al juez Llarena, que todavía no ha confirmado tampoco si las acepta o las rechaza. Lo tendrá que comunicar en las partes antes de dar por cerrada la instrucción. En todo caso, todas las diligencias solicitadas son testificales y documentales y, por lo tanto, no requerirían la presencia de los presos.
El procedimiento de traslado
En primer término, los presos son los que tienen que solicitar a Instituciones Penitenciarias el traslado de prisión. Según fuentes de las defensas, todos ellos ya lo habrían hecho. Entonces, una vez Instituciones Penitenciarias lo ha notificado al juez instructor y si no ha recibido ninguna objeción, la Junta de evaluación de cada centro penitenciario se reúne para estudiar el traslado.
Los presos catalanes están repartidos en tres prisiones: Soto del Real (Jordi Sànchez y Jordi Cuixart), Alcalà-Meco (Dolors Bassa y Carme Forcadell) y Estremera (Oriol Junqueras, Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Turull, Josep Rull). Cada uno de los tres centros tendrá que evaluar estos traslados en sus respectivas juntas.
Hace falta también que haya un informe que acredite la vinculación familiar de los nueve presos catalanes. Como la Generalitat tiene la competencia de prisiones (es la única comunidad autónoma española que la tiene transferida), en base al informe de arraigo y la petición que le haga Instituciones Penitenciarias tendrá que decidir en qué centro penitenciario catalán interna a cada uno de ellos.