Policial
Piden que se condecore la agente que abatió al asaltante de Cornellà
USPAC considera que la actuación de la mossa fue «muy meritoria» porque salvó la vida de otros compañeros
El sindicato USPAC ha pedido que el Departamento de Interior condecore la agente de los Mossos d'Esquadra que el lunes pasado de madrugada abatió al hombre que intentó acceder en la comisaría de Cornellà de Llobregat con la intención de atacar mortalmente los miembros de la policía catalana. USPAC considera que la actuación de la agente «no sólo fue proporcionada sino también muy meritoria y de libro» porque salvó la vida de sus compañeros que en aquel momento estaban dentro de los vestuarios de la comisaría preparando el cambio de turno y que, por lo tanto, no se encontraban operativos y sin armas. En su declaración, la mossa d'esquadra declaró ante el juez que tuvo la sensación que la quería matar y que era un ataque terrorista. El agente hizo hasta cuatro tiros en el brazo, en la pierna y en la cabeza del atacante porque el hombre no bajaba el cuchillo con que la amenazaba.
La defensa de la agente, que lleva al sindicato policial USPAC, también dejó claro que con cada tiro la mossa dio un paso atrás, pero que el atacante no dejaba de avanzar. El hombre llamó a la puerta de la comisaría hacia las seis de la madrugada con la excusa de hacer una consulta. Una vez dentro se dirigió al agente de los mossos, en la recepción, y en cuestión de segundos intentó agredirla con un cuchillo de grandes dimensiones a través de la ventanilla del panel que separa a los agentes de las personas que entran en la comisaría, según ha confirmado Vidal. El hombre profirió la palabra 'Alá' y algunas otras en árabe que la mossa ya no consiguió entender.
La agente pudo esquivar el ataque y corrió por un pasillo hacia dentro de la comisaría pidiendo ayuda a un sargento que acababa de empezar el turno. Los dos dieron el alto al atacante, que, según la declaración que los dos han hecho ante el juez, la había perseguido por el pasillo y que siguió avanzando y amenazándolos con el cuchillo hasta que estuvo a un metro de la mossa.
La policía catalana trata el incidente como un acto de terrorismo yihadista y la Audiencia Nacional se hizo cargo de la investigación. Tanto el conseller de Interior como los máximos mandos y sindicatos de los Mossos d'Esquadra han defendido que el agente actuó con proporcionalidad después de ver amenazada su vida. En declaraciones al ACN, el portavoz del USPAC, Josep Miquel Milagros, ha reiterado que es «clarísimo» que se trata de un ataque terrorista y espera que la causa se cierre «en breve» respecto la condición de investigada de la agente una vez haya tenido lugar la reconstrucción de los hechos.