Un policía español se enfrenta a 24 años de prisión por ciberacosar sexualmente a cuatro menores

El 29 de junio contactó con una chica de 15 años a quien le dijo por teléfono que ella le había llamado la atención, y que no lo importaba su edad siempre que no lo denunciara. De hecho, dijo que si alguna chica le hacía eso, podía encargar a un sicario que la matara a ella o a su familia. Además, le propuso tomar drogas y finalmente tener sexo con él. También la quiso impresionar diciendo que tenía mucho dinero, que la podía llevar de fiesta, comprarle ropa o llevarla de vacaciones, además de presentarle los miembros del grupo musical. Consiguió que la chica lo invitara en casa estando ella sola, en Hospitalet de Llobregat.

El hombre la empezó a acariciar y finalmente le practicó sexo oral, aunque la chica no hizo nada ya que su único propósito era salir en el videoclip. También le ofreció marihuana, según el relato de la fiscalía.

Durante julio, el procesado ofreció a una menor de lo que acababa de hacer 16 años si quería salir a un videoclip como «regalo de cumpleaños» junto con otras amigas suyas. Pero el hombre quería «más que guapas, que sean niñas a quien les vaya la acción», y le explicó que había practicado sexo con dos chicas después de fumar una cachimba y marihuana y después habían salido en un videoclip. Para contactar con las amigas, el hombre le decía a la menor que les ofreciera dinero o buscara «la carencia de cada una». A cambio de ponerlo en contacto con amigas suyas, el hombre le ofrecía a esta menor «dinero, una moto, lo que quieras; no es que yo te compre, yo te ayudo porque tú me ayudas». Días después, el hombre intentó quedar físicamente con la menor para mantener relaciones sexuales.

Con otra menor, de 15 años, que dejó de escribirle, el hombre la llamó el 1 de agosto recriminándole que lo dejara el día anterior «tirado» e insistió en conocer las experiencias sexuales de la menorpor si querría mantener relaciones sexuales con él. Como la menor no accedía a quedar con él, el hombre pidió que le presentara amigas suyas para salir en el videoclip y le ofreció un teléfono móvil de regalo y marihuana. También le pidió fotos con poca ropa.

A otra menor, esta de 13 años, le preguntó cómo era físicamente y le pidió fotos de ella desnuda, cosa que la niña rechazó.

Una de las menores ha declarado por videoconferencia, y la otra separada por una mampara entre ella y el acusado. Han explicado que les pidió fotos, en una de ellas de su culo, pero han asegurado que le dijeron su edad. El hombre les pidió que borraran las conversaciones de whatsapp, y a una de ellas le dijo que tenía entre 22 y 24 años y se presentó con un nombre falso. Una de ellas ha explicado que el hombre le ofreció marihuana y hachís a cambio de presentarle «amigas potentes para mantener relaciones», y le preguntó si le gustaba la cocaína. Cuando insistió para quedar con ella, la chica lo bloqueó en el teléfono móvil porque se «acojonó» y le dió «mal rollo».

Durante la vista oral, un policía español ha declarado que hicieron un seguimiento del agente y lo vieron salir solo del edificio donde vivía una de las menores con quienes había contactado. Por su parte, un mosso a ha explicado que el agente era investigado desde enero de 2016 por otros hechos, ya archivados. Una niña esperaba el autobús para ir a la escuela y el agente se identificó como policía y le ofreció acompañarla en su coche. A pesar de las reticencias iniciales, finalmente la niña subió, y el hombre le explicó que era promotor de discoteca y le pidió fotos por whatsapp y volver a quedar. La madre de la niña descubrió las conversaciones y las denunció a la policía. Eso hizo que intervinieran su teléfono móvil y se pudieron grabar numerosas conversaciones con las menores asediadas, conversaciones que la defensa no niega.

De hecho, los dos testigos de la defensa, una expareja entre el 2013 y en el 2015 y un amigo propietario de una discoteca, han asegurado que el agente de policía era promotor musical, trabajaba en la seguridad de varios locales nocturnos y colaboraba buscando participantes para videoclips.

Por todo eso, el fiscal lo acusa de dos delitos de ciberacoso a menores de 16 años, uno de abuso sexual con acceso carnal a menor de 16 años, dos de engaño a menores de 16 años y uno de tráfico de drogas. En total pide 24 años de prisión y cinco años más de inhabilitación para trabajar con menores de edad, así como prohibición de comunicación o aproximación a las menores de 5 a 15 años, diez años de libertad vigilada y 100 euros de multa.

El juicio continuará el lunes con la declaración del acusado y de la víctima que este miércoles no ha comparecido, si lo hace. La cuarta víctima no declarará porque tiene un informe psicológico que lo desaconseja.

Al salir de la vista, el abogado defensor, José Ramon Vidal Sena, ha dicho que no se trata de hacer «reproches morales» al acusado, sino demostrar que cometió los delitos que se le atribuyen. Según él, las conversaciones grabadas no suponen ninguna prueba de cargo contra su cliente.