La defensa de Llarena quiere que Bélgica dictamine si tiene jurisdicción para juzgar al magistrado español
La acusación mantiene que a demanda no es contra un magistrado del Supremo, «sinó un señor que hizo manifestaciones privadas» que afectan a su trabajo jurisdiccional.
La defensa del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha pedido que Bélgica dictamine si es competente para juzgar al magistrado español antes de entrar en el fondo de la demanda contra él. En la vista preliminar celebrada este martes en Bruselas, la jueza del tribunal de primera instancia de casos civiles ha aceptado que sean tres jueces los que lleven el caso Llarena, teniendo en cuenta la complejidad del caso. La defensa del juez del Supremo, encabezada por el abogado, Hakim Boularbah, ha pedido, sin embargo, que la justicia belga dictamine si es o no competente para llevar el caso antes de entrar en el fondo de la cuestión. La defensa confía en que un máximo de «seis semanas» se pueda dictaminar si Bélgica es o no competente para juzgar Llarena.
«El caso será referido a una cámara de tres jueces. Consideramos que es lo mejor y más positivo teniendo en cuenta su complejidad», ha asegurado el abogado del expresidente Carles Puigdemont y los exconsellers, Gonzalo Boye.
La defensa de Llarena y la acusación tienen discrepancias sobre como tiene que evolucionar el caso. El abogado del juez del Supremo, que actúa en nombre del Estado español, quiere que antes de nada Bélgica declare si es o no competente para juzgar Llarena.
«Hoy España defiende la inmunidad de la jurisdicción de los tribunales y los jueces españoles ante la justicia belga», ha asegurado Boularbah en declaraciones en la prensa.
«Hay discrepancias en la jurisdicción porque, si no, no sabemos qué hace España personada en este caso», ha dicho Boye. Según él, la demanda no es contra «un magistrado del Supremo, sino un señor que se llama Pablo Llarena, que «hizo manifestaciones privadas» que afectan a su trabajo jurisdiccional.
Ahora, las dos partes se intercambiarán escritos sobre esta cuestión, y los tres jueces que han asumido el caso se tendrán que pronunciar. La defensa de Llarena ha dicho que confía en que este tema se pueda resolver en «seis semanas». Para los abogados de Puigdemont, la cuestión se puede alargar mucho más.
En cualquier caso, si finalmente Bélgica decidiera que sí que puede juzgar Llarena, se tendría que marcar un calendario y todo el proceso podría no empezar hasta finales del primer trimestre del próximo año.