Archivada la causa contra la mossa d'esquadra que abatió al atacante de Cornellà

El Juzgado de Instrucción número 2 de Cornellà del Llobregat ha archivado la causa contra la mossa d'esquadra que abatió al atacante de Cornellà el 21 de agosto pasado, según ha anunciado en un comunicado el sindicato policial Uspac, que llevaba la defensa del agente. El hombre intentó agredir a la policía con un cuchillo, ataque que ella repelió con cuatro tiros. Así pues, la jueza da la razón a la versión de la defensa, que sostenía que el atacante quería acabar con la vida de la mossa. El sindicato subraya que, además, en el auto judicial que supone el sobreseimiento de la causa, se remarca la actuación «meritoria» del agente, que sirvió para «proteger» al compañero que tenía en el lado y el resto de mossos que en aquel momento había en la comisaría.

En la resolución el juzgado destaca que a pesar de la dificultad de la situación, la mossa d'esquadra no utilizó el arma «hasta que fue la última opción». También subraya la declaración del compañero, que afirmó que si no hubiera disparado ella, lo habría hecho él. Estas cuestiones, entre otros de naturaleza jurídica, hacen concluir en el juzgado que la actuación del agente fue «en legítima defensa».

El sindicato ha lamentado que el Departamento de Interior «rehusara comparecer» en el procedimiento judicial para defender desde su posición la actuación del agente, «a pesar del ofrecimiento del Juzgado». Una «mancha más» en la gestión «nefasta» del departamento, que a opinión de Uspac está «más preocupado de hacer política de cara a la galería» que de defender los intereses del cuerpo de Mossos d'Esquadra. El sindicato ha pedido que el Departamento de Interior condecore al agente.

Hay que recordar que el 21 de agosto, hacia las seis de la madrugada, un hombre llamó a la puerta de la comisaría de Cornellà con la excusa de hacer una consulta. Una vez dentro se dirigió al agente, en la recepción, y en cuestión de segundos intentó agredirla con un cuchillo de grandes dimensiones a través de la ventanilla del panel que separa a los agentes de las personas que entran en la comisaría. El hombre profirió la palabra 'Alá' y algunas otras en árabe que la mossa ya no consiguió entender.

El agente pudo esquivar el ataque y corrió por un pasillo hacia dentro de la comisaría pidiendo ayuda a un sargento que acababa de empezar el turno. Los dos dieron el alto al atacante, que, según la declaración que los dos hicieron ante el juez, la había perseguido por el pasillo y que siguió avanzando y amenazándolos con el cuchillo hasta que estuvo a un metro de la mossa.

La mossa d'esquadra declaró ante el juez que tuvo la sensación que el hombre la quería matar y que era un ataque terrorista. El agente hizo hasta cuatro tiros en el brazo, en la pierna y en la cabeza del atacante porque el hombre no bajaba el cuchillo con que la amenazaba.