Justicia
Marchena se descarta ahora como candidato a presidir el CGPJ y el Tribunal Supremo
El magistrado, cuestionado después del Whatsapp de Cosidó, seguirá presidiendo la Sala que juzgará el 1-O
El presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, ha anunciado este martes mediante un comunicado que no opta a presidir el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Tribunal Supremo. Una decisión que llega después de que el PSOE y el PP pactaran la renovación del órgano de gobierno de los jueces y filtraran su nombre antes de su elección por parte de los vocales de este organismo, y también después de que se conociera el mensaje del portavoz del PP en el Senado dirigido a sus compañeros de grupo donde aseguraba que con su designación el PP controlaría «por detrás» la Sala del Tribunal Supremo que juzgará el 1-O.
Marchena continuará de esta manera presidiendo la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo y el tribunal que juzgará a los líderes independentistas.
En el comunicado que ha difundido, Marchena «anticipa públicamente» su «decidida voluntad de no ser incluido, para al caso en que así fuera considerado, entre los candidatos al puesto de presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial».
Lo hace ante «las noticias divulgadas a los últimos días sobre su hipotética designación como presidente del Tribunal Supremo y del CGPJ».
Asegura que «nunca he concebido el ejercicio de la función jurisdiccional como un instrumento al servicio de una u otra opción política para controlar el desenlace de un proceso penal».
Y destaca que su trayectoria como magistrado «ha sido siempre presidida por la independencia como supuesto de legalidad de cualquier decisión jurisdiccional» como lo demuestra, dice el magistrado, cualquier examen de las resoluciones que ha dictado como miembro del Tribunal Supremo.
«Nunca he actuado condicionante la aplicación del derecho a la opción política del querellado o denunciado», sostiene.
El PP da por roto el acuerdo para la renovación del CGPJ
El PP da por roto el acuerdo con el PSOE para la renovación del Consejo General del Poder Judicial, según ha anunciado este martes a RNE el vicesecretario de Organización de los populares, Javier Maroto. Es la reacción a la renuncia a la candidatura a presidir el CGPJ por parte del presidente de la Sala Segunda del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, que era el nombre escogido por los populares a cambio de ceder al PSOE la mayoría de sillas en el CGPJ. Según Maroto, el PP «da por roto el acuerdo» y suspende por lo tanto la renovación del CGPJ «hasta que la ministra Delgado sea cesada». El acuerdo, según Maroto, «está roto» y «la culpa es del gobierno para filtrar el contenido de las negociaciones y poner el nombre de Marchena en la picota dejándolo en mal lugar».
Maroto ha hecho estas manifestaciones pocos minutos después de que Marchena haya anunciado que no optará a la presidencia del CGPJ. El magistrado ha adoptado la decisión después de ver como se anunciaba su designación antes de que se conocieran los nombres de los vocales que teóricamente lo tienen que elegir, y también después de que se difundiera un mensaje de watsapp del portavoz del PP al Senado Ignacio Cosidó, que apuntaba que con su designación los populares controlarían «por detrás» la sala del Tribunal Supremo que juzgará el 1-O.
Según Maroto, la renuncia es sólo fruto de la filtración de su nombre. «La decisión del gobierno de hacer púbico su nombre sin elegir vocales ha hecho uno mal irreparable», ha apuntado, porque «se ha puesto en cuestión su imparcialidad y la responsabilidad institucional del PP». Además, ha añadido al dirigente del PP, «se ha intentado presentar esta renovación como algo oscuro» mientras que el PP «ha mantenido una posición de responsabilidad».