Felipe V evita referirse a Cataluña pero hace un llamamiento a «asegurar la convivencia»

El rey Felipe VI ha hecho un llamamiento a «asegurar la convivencia» en el tradicional discurso de Navidad y a superar los problemas desde la «unión y el acuerdo». De hecho, convivencia es la palabra más repetida del discurso. Lo ha pronunciado en siete ocasiones en poco más de 10 minutos, aunque sin referirse directamente a Cataluña. El monarca también ha remarcado que la convivencia «exige con respecto a la Constitución» y ha pedido tener presente el espíritu de la transición, dejando de lado el «rencor y el resentimiento». «Son actitudes que forman parte de nuestra peor historia y no hemos permitir que renazcan», ha dicho. También ha dedicado buena parte del discurso a los jóvenes, de quien reconoce que hay que darles «trabajo y salarios dignos». Además, ha pedido «igualdad real» entre hombres y mujeres y acabar con la violencia machista.

El rey Felipe VI se ha dirigido a la sociedad española en el tradicional mensaje de Navidad televisado desde el salón de audiencias del Palaciou de la Zarzuela. El llamamiento a mantener la convivencia y garantizarla a las generaciones futuras ha centrado buena parte del discurso.

En los 40 años de la Constitución, Felipe VI no ha dejado pasar la ocasión para reivindicar el espíritu de la transición y sus «ideales»: «Reconciliación y concordia, diálogo y entendimiento, la integración y la solidaridad», ha dicho. También ha remarcado la voluntad de partidos y agentes sociales de llegar a acuerdos «a pesar de estar muy distanciados en sentimientos e ideas». Y ha añadido que hace falta que todo el mundo trabaje para que estos principios «no se pierdan ni se olviden».

Sin referirse directamente ni una sola vez a Cataluña, el jefe del Estado sí ha hecho un llamamiento a «asegurar la convivencia» y a superar los problemas con «unión y acuerdo». «La convivencia es el mayor patrimonio que tenemos los españoles» ha remachado, añadiendo que hace falta «defenderla, protegerla y cuidarla».

»És imprescindible que aseguramos en todo momento la convivencia», ha dicho Felipe VI, que considera que esta se basa en el con respecto a las personas, las ideas y los derechos de los otros y que pasa por «cumplir la Constitución». En palabras del rey, la carta magna supone los «cementos sólidos» que toda sociedad necesita para construir un proyecto. También ha definido la carta magna como una “realidad viva”, no “inerte”, que “ampara, protege y tutela” los derechos y libertades.

«Es necesario que cuidemos y reforzemos los profundos vínculos que nos unen y que siempre nos tienen que unir a todos los españoles», ha manifestado. De hecho, Felipe VI ha abogado por la «unión y el acuerdo» de la sociedad española para superar problemas e injusticias”.

«Hemos de ser conscientes de la nueva realidad que nos impone el siglo XXI y ser capaces de llegar a consensos cívicos y sociales que aseguren el gran proyecto de modernización de España», ha añadido.

Los jóvenes y las mujeres, protagonistas

El rey también ha dedicado buena parte del discurso a las generaciones jóvenes y ha preguntado a los mayores que los hagan «partícipes» del espíritu de la transición para que conozcan «por qué y cómo ha prosperado la sociedad española». Sin embargo, Felipe VI considera que eso es «insuficiente» y que la sociedad tiene una «deuda» con los jóvenes. «Somos responsables de su futuro y las circunstancias de hoy no son, ni mucho menos, las más fáciles», ha subrayado.

El monarca ha alabado las generaciones jóvenes diciendo que creen en la paz, están preocupados por el cambio climático y son solidarios, entre otros. «Queréis vivir y convivir pero tenéis problemas serios», ha dicho durante el discurso. Por eso, cree que hay que garantizar la emancipación y un trabajo y salarios «dignos».

El rey ha destacado que hay que hacer el esfuerzo por las generaciones jóvenes para incorporarlos en la construcción de una «España más cohesionada socialmente y más comprometida con la igualdad real entre hombres y mujeres».

Felipe VI también se ha referido a la violencia contra las mujeres y ha dicho que es uno de los principales problemas del país, junto con la corrupción, el terrorismo, la convivencia, el paro o la cohesión social. «La violencia contra las mujeres merece siempre nuestra repulsa y condena más enérgica y la tozudez de toda el afán de la sociedad para erradicarla», ha pedido.

Felipe VI ha concluido el mensaje felicitando la navidad en las cuatro lenguas cooficiales del Estado.