La Generalitat convoca oposiciones para 5.005 plazas de docentes
La oposiciones priorizaran la evaluación de las competencias de los docentes y serán menos memorísticas
El Gobierno ofrece un incremento de 3.500 maestros más para el curso que viene
Educació convoca este 2019 5.005 plazas de oposiciones al cuerpo de maestros, de Educación secundaria y de Formación Profesional. Para priorizar la vertiente competencial de los futuros docentes se ha modificado el orden de las pruebas y se empezará con la parte más práctica, la presentación de la programación y la unidad didáctica, que la tendrán que hacer todos los aspirantes. Los que la superen, tendrán que demostrar los conocimientos en la fase memorística, donde también se cambian los baremos por los que la parte temática sólo suponga el 30% de la calificación. Por eso, el proceso de oposición se alargará más tiempo. Para evitar que interfiera en el día a día en las escuelas, Educació prevé empezar los exámenes el próximo junio y culminarlo antes del 31 de octubre. Así, los aprobados no serán nombrados funcionarios hasta septiembre del 2020.
Según ha explicado el conseller de Educació, Josep Bargalló, los cambios que se aplican por primera vez en este proceso de oposición tienen que permitir seleccionar personas «con más competencia docente» y así, que estén de acuerdo con el currículum del Departament. Por eso, el primer paso ha sido modificar el orden de las pruebas. De esta manera, todos los aspirantes, que se calcula que pueden llegar a los 50.000 si se tiene en cuenta que el año pasado por 2.000 plazas se apuntaron 20.000 docentes, tendrán que exponer la programación y la unidad didáctica.
Para el director de profesorado, Ignasi Garcia-Plata, el proceso tiene que servir para identificar a la persona que «pueda enseñar mejor» una materia y no la que sepa más, y por lo tanto, se priorizará demostrar el planteo de casos en un aula y no la demostración de contenidos memorísticos.
El cambio en la orden de las pruebas va acompañado también del cambio de ponderación de la parte más memorística, donde la exposición de un tema sólo contará el 30% de la nota de esta fase, mientras que el 70% restante saldrá de la parte práctica.
Además de estos dos cambios procedimentales, las oposiciones de este 2019 permitirán hacer alegaciones al final de cada prueba, para hacer todo el proceso, «más justo» según ha indicado Bargalló.
Por todo eso, el calendario del proceso de selección se puede llegar a duplicar. A fin de que interfiera el mínimo con la actividad lectiva de las escuelas, y que estas no vean alterado su funcionamiento habitual, se ha planteado que las pruebas empiecen a mediados del mes de junio, para que el grosor se desarrolle durante julio. De esta manera, y con la dilación de todo el proceso, el Departament prevé finalizar toda la evaluación el 31 de octubre, por lo que, los aspirantes aprobados que obtengan una plaza en el cuerpo de función pública docente, no serán nombrados como tal, en prácticas, hasta el próximo curso, en septiembre del 2020.
Para el conseller, el cambio y el alargamiento de todo el proceso no les ha dado «miedo» porque es una apuesta por la calidad del procedimiento de selección. Para Bargalló, unas oposiciones rápidas van mejor para el sistema, si se hacen con más tiempo lo complican «son más justas».
Bargalló ha explicado que todos estos cambios se han hecho a partir de las competencias que tiene el Departament en esta materia pero que si es pudiera, se modificarían los exámenes para que fueran 100% competenciales, con todavía más prácticas y casos de aula. Para Bargalló, sólo a través de la práctica se puede saber si los conocimientos son sólidos o si se reproducen como ítem. Por eso, el conseller ha asegurado que seguirán trabajando con el Ministerio para ir introduciendo nuevos cambios en el sistema de oposiciones de docentes.
El titular de Educación también ha destacado la importancia de estabilizar las plantillas que actualmente sufren un 32% de interinato. De las 5.005 plazas convocadas, publicadas este lunes en el DOGC, 3.605 corresponden al cuerpo de maestros, 759 al cuerpo de profesores de enseñanza secundaria y 642 en el cuerpo de maestros, unas proporciones para|por responder al 27, 43 y 50% de interinato que hay actualmente en estos cuerpos, respectivamente.
Garcia-Plata ha destacado que la convocatoria de plazas favorecerá también una mejor calidad del sistema ya que los centros muchos interinos tienen «más dificultados» cuando buena parte de la plantilla son interinos por su vinculación al proyecto educativo. Y por lo tanto, ha destacado que la estabilización del personal no sólo es una mejora de las condiciones de los profesores sino que acaba revirtiendo en el sistema.
Las solicitudes se podrán presentar entre el 16 de enero y el 4 de febrero y la lista definitiva de admitidos y excluidos se publicará la segunda quincena de mayo. El proceso de selección empezará a mediados de junio y se prevé que se acabe antes del 31 de octubre. Se calcula que todo el proceso supondrá un coste en torno a los 3 MEUR por las dietas de los tribunales, los alquileres de espacio y la necesidad de material.
Esta es la convocatoria de oposiciones más grande en 10 años, ya que el año pasado, la convocatoria sólo fue de 2.000 plazas y hace dos años de 400, que fueron las primeras después de los recortes. Se prevé que como mínimo se convoquen 15.658 plazas más hasta el 2023.