Sucesos
El joven que descuartizó a su madre: «Sí, mi madre está aquí dentro»
El chico, de 26 años, fue detenido el jueves
Un chico descuartiza a su madre y pone los trozos en tupperwares para ir comiéndoselos
Un joven de 26 años fue detenido el pasado jueves por, presuntamente, matar y descuartizar a su madre, de 66 años. «Sí, mi madre está aquí dentro. Muerta», dijo a la Policía cuándo asistió al domicilio. A pesar de todo, la escena que se encontraron los agentes superaba lo dantesco: los restos de la mujer se encontraban repartidos en varios tuppers por toda la casa, y había huesos diseccionados y otras partes del cadáver en un cajón.
El joven abrió la puerta a los agentes y, con una actitud fría, indicó: «El perro y yo nos hemos ido comiendo a trozos a mi madre». Uno de los policías no pudo aguantar la escalofriante escena y tuvo que salir del edificio a tomar el aire, según recoge El País. Acto seguido, el joven fue arrestado.
Asimismo, según fuentes de la investigación que cita El Mundo, el detenido tiró a la basura varias vísceras, localizadas a los cubos del edificio, y se cree que el crimen se cometió hace dos o tres semanas.
A causa del estado en el cual se encontraba el cuerpo de la víctima, en «trozos muy pequeños», los investigadores ven difícil encontrar el arma del crimen o averiguar cómo murió. El nivel de precisión y disección del cuerpo también ha hecho pensar que podría haber utilizado una picadora o una máquina parecida. Todo apunta a un caso de «canibalismo», han señalado fuentes policiales.
Una amiga llevaba un mes sin verla
La detención se produjo el mismo día que una amiga de la víctima, extrañada, se dirigió a una comisaría del distrito de Salamanca para poner una denuncia por su desaparición, ya que llevaba más de un mes sin saber nada de ella y no respondía en el teléfono.
La denunciante comentó además a los agentes que la mujer vivía con un hijo que podría tener problemas psiquiátricos. Después de eso, una patrulla se dirigió al domicilio de la mujer muerta, ubicado en el numero 50 de la calle Francisco Navacerrada, en el barrio de Ventas, donde encontraron a la mujer descuartizada.
Antecedentes y malos tratos
El arrestado, que tiene hasta doce antecedentes policiales, la mayoría por malos tratos a su madre, protagonizaba fuertes discusiones junto a su progenitora. Según los vecinos, era frecuente escuchar «voces y gritos» así como ver al Samur o a la Policía en el domicilio. Además, la mujer encubría los moratones que le causaba su hijo diciendo que se había caído mientras paseaba el perro.
Una vecina de la víctima afirmaba en declaraciones en Europa Press sentirse «sorpresa», ya que el presunto asesino era «muy normal», aunque reconocía que tenía problemas con las drogas. «Yo pensaba que le daban ataques mentales pero ella me dijo una vez que tuvo que llamar a la Policía porque su hijo se había puesto muy mal», aseguró.
La víctima tenía otro hijo más grande, casado y que no mantenía relación con el detenido después de haber intentado mediar, sin éxito, en los problemas de la familia, según El País. El padre murió hace 15 años.