Un teniente reprocha a los Mossos que no garantizaran la «seguridad» durante una protesta de los CDR en el cuartel de Manresa
Relata que estuvieron cerrados durante dos horas el 20-S por una 'performance' en la puerta y que los manifestantes izaron la bandera
Juicio 1-O, Tribunal Supremo
Un teniente de la Guardia Civil responsable de la seguridad en el cuartel de Manresa (TIP G97659Y) ha relatado que el 20 de septiembre los Mossos no les garantizaron la seguridad ni hicieron ningún «perímetro» aunque sabían, según sostiene, que habría una protesta de los CDR en el cuartel que reunió 2.000 personas. Según ha relatado, dio el orden de cerrar la puerta del cuartel (donde viven 160 personas entre agentes y familiares) y ordenó sacar la bandera española. Estuvieron sin «libertad ambulatoria» durante dos horas y ha explicado que los manifestante hicieron una 'performance' con simulación de votación con urnas de cartón y que izaron una estelada en el palo que había quedado vacío. A pesar de reconocer que había presencia de Mossos y mantuvieron comunicaciones, cree que no actuaron debidamente. «La estelada la puedes sacar cuando se marchen los manifestantes», ha explicado que le dijeron a los Mossos. Además, ha reconocido que sintió «temor e intranquilidad» y que hasta el día 3 de octubre hubo otros.
El teniente ha explicado que los concentrados venían de una manifestación previa convocada por el Ayuntamiento de Manresa y se unieron a la de losCDR, que protestaban por los registros del 19 de septiembre en Unipost. Según ha afirmado, no había ningún perímetro de seguridad en el cuartel a pesar de que losCDRhabían convocado en la plaza Sant Domènec, cerca de las dependencias policiales.
Según ha explicado, fue él quién dio la orden de cerrar la puerta del cuartel (según ha dicho habían sufrido años antes situaciones similares y también optó por esta medida) y que también ordenó retirar la bandera española. Ha afirmado que la concentración llegó a ser de 2.000 personas que llegaron a estar cerca de las puertas y ocuparon toda la acera. «Gritaban independencia, votaremos, bote bote español quien no bote o fascistas», ha explicado.
A preguntas del fiscal, ha descrito que durante dos horas nadie pudo entrar ni salir del cuartel y ha explicado que viven hasta 160 personas de entre 0 y 80 años. «No se me ocurrió dejarlos salir porque no sé como reaccionará la gente, y no solo soy responsable de los agentes sino también del resto», ha explicado.
Impiden salir coches que iban a hacer un registro
También ha dicho que después de la concentración del 20 de septiembre vinieron varias más, con una de más de 15.000 personas el 3 de octubre. Una de ellas, el 28 de septiembre, era de estudiantes y les afectó porque tenían que salir a hacer una diligencia ordenada por el juez, donde requisaron papeletas en una nave de Igualada.
Ha afirmado que se puso en contacto con un sargento de los Mossos para pedirle que le abrieran un pasillo pero le dijo que se esperara que estaban a punto de levantar la manifestación. En cambio, él ha explicado que decidió dirigirse «en su lengua» y que «funcionó» porqué les dejaron pasar.
También ha respondido al fiscal que esta y otras concentraciones afectaron la «vida cotidiana» de los que vivían en el cuartel y que se producían situaciones «esperpénticas» porque en la concentración de estudiantes había chicos que estudiaban con hijos y familiares de guardias civiles que vivían en el cuartel.