Muere un hombre después de que la policía lo redujera por amenazar a la inquilina de su piso a Salt con un hacha

Un hombre de 60 años ha muerto este miércoles por la noche después de que los Mossos d'Esquadra y la Policía Local de Salt lo redujeran para amenazar, armado con una hacha, una mujer que le tenía alquilada una habitación en un piso a la calle Pep Ventura 66. Los hechos pasaron ayer cerca de las diez de la noche y unos vecinos alertaron trucando al teléfono de emergencias 112. Cuando las patrullas llegaron al lugar, localizaron el hombre visiblemente alterado que se resistió a la detención y los agentes lo tuvieron que reducir para detenerlo como supuesto autor de un delito de amenazas y de resistencia a agentes de la autoridad. Según fuentes del caso, cuando lo tenían esposado efectivos del SEM lo examinaron, entonces estaba consciente. Cuando iban a trasladarlo, pero, perdió el conocimiento y murió. Los Mossos han abierto una investigación pero la autopsia apunta que fue una muerte repentina por paro cardiaco.

El hombre de 60 años era el propietario de un piso situado en la calle Pep Ventura 66 de Salt (Gironès) y tenía una habitación alquilada a un matrimonio. Hacia las nueve y media de la noche, según fuentes del caso, el hombre cogió un hacha y empezó a amenazar a la mujer quien tenía de inquilina mientras le decía, también, que mataría a su marido (que en aquel momento no estaba en el piso).

Según las mismas fuentes, la mujer pudo llamar por teléfono para pedir ayuda, aunque el propietario del inmueble seguía profiriendo amenazas. Los Mossos d'Esquadra informan que el teléfono de emergencias 112 recibió la alerta hacia las diez de la noche.

Hasta el piso se trasladaron varias patrullas de los Mossos d'Esquadra y de la Policía Local de Salt. Cuando los agentes llegaron al piso, encontraron al autor de las amenazas visiblemente alterado.

Cuando lo intentaban detener, el hombre se resistió. Entonces, los agentes lo tuvieron que reducir para arrestarlo como supuesto autor de un delito de amenazas y otro de resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad.

Fuentes próximas a la investigación concretan que, cuando|cuándo lo tenían esposado en el rellano del piso, efectivos del Sistema de Emergencias Medicas lo atendieron. El hombre estaba alterado y, durante el reconocimiento, los sanitarios alertaron de que el detenido tenía falta de oxígeno en la sangre. Entonces, antes de que pudieran trasladarlo a un centro médico, el arrestado perdió el conocimiento.

Los sanitarios le hicieron maniobras de reanimación cardiopulmonar pero el hombre entró en paro cardiaco y murió.

La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d'Esquadra en Girona han abierto una investigación para aclarar las circunstancias de la muerte. La autopsia tendrá que determinar las causas del deceso. Fuentes del caso señalan que el hombre, de 60 años y nacionalidad española, tenía patologías médicas previas.