La alemana Ursula von der Leyen presidirá la Comisión Europea y Borrell la diplomacia

Los jefes de estado y de gobierno de la Unión Europea han propuesto la alemana Ursula von der Leyen como nueva presidenta de la Comisión Europea en sustitución de Jean-Claude Juncker. Después de tres días de intensas y complicadas negociaciones, los 28 han llegado a un acuerdo para repartirse los cargos de las principales instituciones europeas que también avala al actual ministro español Josep Borrell para liderar la diplomacia de la Unión Europea como Alto Representante de Asuntos Exteriores y Seguridad. El pacto también incluye a Christine Lagarde, como candidata a presidir el Banco Central Europeo (BCE) en sustitución de Mario Draghi. Los 28 ya han cerrado, además, que el aún primer ministro belga, el liberal Charles Michel, sea el nuevo presidente del Consejo Europeo, en sustitución del polaco Donald Tusk.

Si bien el nombre de Michel está confirmado, porque los estados no requieren de ningún acuerdo inter-institucional para escoger al presidente del Consejo, el resto requieren del apoyo explícito o el aval del Parlamento Europeo.

Un apoyo que puede resultar especialmente complicado porque Ursula von der Leyen no era 'spitzenkandidaten', es decir, no se presentó a las europeas con la voluntad de presidir la CE, y los eurodiputados se comprometieron a confirmar por el cargo, sólo, a un candidato o candidata que lo hiciera.

De hecho, la líder de los socialdemócratas en la Eurocámara, Iratxe García, ha asegurado que la propuesta de von der Leyen es «profundamente decepcionante». «Nuestro grupo se ha mantenido firme en la defensa de la democracia europea y el proceso spitzenkandidat y no queremos que muera», ha asegurado.

Según García, es «inaceptable» que haya gobiernos europeos que «descarten el mejor candidato», que desde su opinión es el holandés Frans Timmermans, porque impulsó los procedimientos de sanción contra Polonia o Hungría desde la Comisión «defendiendo el estado de derecho y los valores europeos».

La presidencia de la Comisión Europea se tiene que votar por mayoría absoluta en el pleno de la Eurocámara.

En el caso de Borrell, su cargo dependería del nombramiento que hiciera la nueva presidenta de la Comisión Europea, y también requeriría del consentimiento del Parlamento Europeo.

Con respecto a Lagarde, la decisión formal para convertirla en presidenta del BCE la tendrá que tomar el propio Consejo Europeo, habiendo consultado el Parlamento y el consejo ejecutivo del BCE.

Según ha explicado el presidente español, Pedro Sánchez, el acuerdo entre los estados también contempla que Frans Timmermans, hasta ahora su candidato a la presidencia de la Comisión, sean vicepresidente primero de la institución, y que el liberal Margrethe Vestager sea la vicepresidenta segunda.

¿Fin del modelo 'spitzenkandidaten'?

La propuesta acordada por los 28 estados miembros después de jornadas maratonianas de negociaciones, deja fuera de la carrera para presidir la Comisión al popular Manfred Weber y el socialdemócrata Frans Timmermans, los 'spitzenkandidaten' de los dos principales partidos europeos.

Y eso amenaza con abrir una crisis inter-institucional entre el Consejo y el Parlamento. De hecho, el portavoz de la cámara, Jaume Duch, ya advirtió recientemente que para el Parlamento sería como dispararse «un tiro en el pie» avalar como presidente de la Comisión Europea a alguien que no formara parte del sistema de los 'spitzenkandidaten', es decir, que no se presentara a los comicios en representación de alguno de los partidos europeos y con la voluntad expresa de asumir este cargo.

En un desayuno en el CIDOB, Duch dijo que los grupos parlamentarios europeos tienen «esta línea roja» y son conscientes de que si avalan un nombre que no forme parte de la lista inicial «estarán perdiendo todos». «Sería un mal comienzo de la legislatura, una manera de autodebilitarse», dijo entonces el portavoz de la institución.

Ahora, los eurodiputados tendrán sobre la mesa una propuesta para votar a una candidata escogida por los estados pero que no se presentó a las elecciones europeas para optar a la presidencia de la Comisión.

La presidencia de la Eurocámara

Después del acuerdo entre los 28, el miércoles el Parlamento Europeo tendrá que votar su nuevo presidente o presidenta. Algunas filtraciones previas al pacto apuntaban al búlgaro socialista Sergei Stanishev para el cargo. Con todo, en Estrasburgo los eurodiputados insisten en defender su independencia a la hora de determinar la presidencia de la institución sin interferencias de los estados.

Hasta las 22 horas, se pueden presentar candidaturas para sustituir a Antonio Tajani al cargo. Cualquier nuevo presidente o presidenta requerirá, como mínimo, del acuerdo entre tres partidos. Por ahora, se han presentado la alemana verde Ska Keller y la española de Podem Sira Rego. Queda para saber cuáles serán los candidatos que presenten los tres principales grupos: populares, socialistas y liberal demócratas.