Policial
Un clan familiar en el Prat escondía bajo la ducha la entrada en una plantación de marihuana
Habían excavado bajo el inmueble para ocultar el cultivo y uno de los detenidos se presentó a las elecciones municipales
Un operativo conjunto de la Guardia Civil, Mossos D'Esquadra y Policía Nacional ha desarticulado un clan familiar en el Prat de Llobregat dedicado al tráfico de marihuana. Habían excavado bajo el inmueble para ocultar una plantación. Escondían la entrada bajo un plato de ducha. Hay seis detenidos acusados de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico, tenencia ilícita de armas y pertenencia a grupo criminal. Una séptima persona fue arrestada porque tenía una orden de ingreso en la prisión por una causa anterior. La investigación ha durado cinco meses. La organización tenía vínculos con el narcotráfico internacional y tenía una estructura jerarquizada y altamente especializada. Uno de los líderes del clan se había presentado a las elecciones municipales bajo el paraguas de una agrupación local.
Los detenidos son seis hombres y una mujer, seis españoles y un marroquí, de entre 22 y 53 años. La mujer fue detenida porque tenía una orden de ingreso en la prisión pendiente. La investigación tuvo su origen en una información de la Guardia Civil sobre un cargamento de marihuana con destino Holanda. El vehículo con lo que estaba previsto hacer el envío estaba siendo investigado por los Mossos d'Esquadra porque sospechaban que se utilizaba para el tráfico de drogas. Era de uno de los líderes del clan. Por otra parte, la Policía Nacional tenía una investigación abierta en torno al círculo de confianza del principal investigado.
Los tres cuerpos pusieron en marcha un equipo conjunto y consiguieron determinar cómo se estructuraba y cómo funcionaba el clan principal y el resto de personas que participaban. El juzgado de instrucción número 4 del Prat coordinó las actuaciones policiales. La estructura era de tres niveles, con tareas diferenciadas que permitía que pudieran parcelar su actividad.
Las entradas y detenciones se llevaron a cabo el 19 de junio, seis en el barrio de Sant Cosme del Prat y una en Abrera. El chalet de Abrera, donde había dos miembros del clan, pertenecía a un banco y estaba ocupado.
En los registros se intervinieron tres armas cortas, una de ellas de calibre 45, dos simuladas, 50 cartuchos de munición, un cargador de pistola, munición de guerra, una defensa eléctrica, un arma de fuego larga inutilizada, armas blancas contundentes, 1.025 plantas de marihuana, 1.016 esquejes, 24,8 kilos de ovillos, cuatro vehículos, 9.900 euros, un contador de billetes y documentación diversa.
En uno de los inmuebles registrados se localizó una plantación oculta en un sótano que el clan expresamente había excavado debajo, ocultando la entrada bajo un plato de ducha de más de 200 kilos de peso, y que se accionaba mecánicamente. Habían reforzado la estructura con vigas, sin las preceptivas medidas de seguridad. El complejo estaba formado por tres estancias de unos quince metros cuadrados y 2,5 metros de altura. Allí se encontraron 710 plantas de marihuana y un arma corta de aire comprimido. Para localizar esta plantación se utilizó un equipo de Geo Radar por parte de personal del Tedax de la Guardia Civil.
Manipularon la red general eléctrica para alimentar las plantaciones, camuflando el elevado consumo eléctrico y con el correspondiente riesgo de incendio por sobrecarga.
El día 21 de junio los arrestados pasaron a disposición judicial y el juez decretó prisión para tres de ellos y libertad con cargos para los otros cuatro. En estos momentos la investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.