Suspendidos los decretos de creación de las delegaciones de la Generalitat en Argentina, México y Túnez

La sala contenciosa-administrativa del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha suspendido cautelarmente los tres decretos de la Generalitat del mes de junio para crear delegaciones en Argentina, México y Túnez, después de que el Ministerio de Exteriores español recurriera en contra en octubre. Las delegaciones todavía no han abierto. La decisión se puede recurrir. El Ministerio asegura que la actividad de las oficinas de la Generalitat en el exterior es «nociva para los intereses del Estado» y que tienen un «papel bien definido dentro del plan secesionista». Y añaden que se puede «prever» que las nuevas delegaciones seguirán «una línea de actuación similar».

En el recurso, el Ministerio pedía la suspensión de la ejecución de los decretos de creación para «evitar los perjuicios de difícil o imposible reparación en la imagen de España y en la política exterior que indudablemente se producirán desde que entren en funcionamiento». De hecho, la Abogacía del Estado argumenta, en nombre del Ministerio de Exteriores, que «con carácter general» las delegaciones de la Generalitat en el exterior han hecho «sistemáticamente actuaciones contrarias al ordenamiento vigente» y «a los principios de unidad de acción en el exterior, lealtad institucional, coordinación y cooperación y de servicio al interés general».

El Ministerio asegura que con la creación de las nuevas delegaciones se «persiste» en la voluntad de la Generalitat en «dotar de proyección internacional al proceso de transición nacional o secesionista», que tiene en el ámbito exterior «uno de sus pilares esenciales». Además, añaden que la Generalitat tiene como objetivo «dotarse del carácter de sujeto de derecho internacional». De hecho, pone ejemplos de declaraciones o contactos con organismos internacionales que han mantenido a algunos de los delegados en el exterior de oficinas ya en marcha.

Así, el gobierno español asegura al TSJC que las delegaciones que están en funcionamiento «han seguido pautas de actuación propias de sujetos de derecho internacional, estableciendo contactos con embajadas de otros países», siguiendo «la estrategia marcada por los dirigentes catalanes para conducir en Cataluña hacia la independencia» y siendo «nociva a los intereses del Estado a la vista que el objetivo claro y manifiesto del Gobierno de la Generalitat de utilizar todos los medios a su alcance al servicio del proyecto secesionista».

El Ministerio también avisa de los «perjuicios de imposible o difícil reparación al interés general» que considera que están produciendo estas delegaciones en la política exterior de España.

Además, el gobierno español también considera que la Generalitat no esperó a «la emisión de los correspondientes informes preceptivos» de los ministerios de Exteriores y Hacienda antes de la aprobación de los decretos de creación de las nuevas delegaciones.