El Gobierno propone un salario mínimo catalán de 1.239 euros al mes en 14 pagas

El Gobierno propone un salario mínimo catalán de referencia de 1.239,5 euros al mes en 14 pagas para garantizar una vida digna en Cataluña. La cifra se obtiene calculando el 60% de la media salarial catalana y es 340 euros más alta que el sueldo mínimo mensual fijado en el Estado. La Generalitat considera que una retribución ajustada a la realidad socioeconómica catalana tendría que ser de 17.353 euros el año, un 37,7% más que el español. El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el conseller de Treball, Afers Socials i Famílies, Chakir el Homrani, han explicado la propuesta a sindicatos y patronales aprovechando un pleno del Consejo de Relaciones Laborales. El Gobierno no tiene competencias para forzar el incremento del salario mínimo y, por eso, presionará los agentes sociales para que lo apliquen vía negociación colectiva y lo impulsará en sus políticas salariales y de contratación pública.

El Ejecutivo catalán aprobó un acuerdo para impulsar la estimación del sueldo mínimo de referencia catalán y su incidencia potencial y ha presentado este jueves las primeras conclusiones. Según el estudio, casi un 31% de la población catalana se vería beneficiada por este incremento del salario mínimo de referencia, cosa que quiere decir que este porcentaje de trabajadores ahora mismo cobra por debajo de los 1.239,5 euros.

La secretaría de Economía, Natàlia Mas, ha añadido que este incremento afectaría a más mujeres que hombres porque son ellas las que ocupan «la parte baja» de la pirámide salarial. En concreto, beneficiaría a un 38% de mujeres y un 24% de los hombres trabajadores en Cataluña. Con el impulso de este concepto, la Generalitat pretende corregir los «desequilibrios» del mercado laboral, revertir los recortes salariales y mejorar las condiciones de trabajo de las mujeres, los jóvenes y las personas sin calificación profesional.

«Que la competencia de la fijación del salario mínimo sea del Estado no quiere decir que la Generalitat se tenga que quedar de brazos doblados ante la pobreza», ha remachado Aragonés. Así pues, el vicepresidente y conseller de Economia ha asegurado que aunque no pueden forzar el aumento del sueldo mínimo, el Gobierno presionará los agentes sociales para que apliquen este salario vía negociación colectiva de manera «progresiva». Sobre la oposición de las patronales a incrementar los sueldos ha apuntado que están dispuestos a discutir con las organizaciones empresariales «si hay voluntad» y ha añadido: «Creo que hay, pero hay que acompañarlos».

En el mismo sentido, el conseller de Treball ha asegurado que «la apuesta» que se hace en Cataluña por la concertación social hace que no sea «pesimista» de cara a conseguir el apoyo de las organizaciones empresariales.

Además, ha recordado que las patronales catalanas no se mostraron contrarias a la subida del salario mínimo estatal, a diferencia de otros organitzacions.

Además, el Gobierno se ha comprometido a situar este sueldo de referencia también en sus políticas salariales y de contratación publica. La incidencia dentro del personal de la Generalitat sería baja porque entre los 240.000 trabajadores públicos hay «pocos» con sueldos inferiores a los 1.200 euros, ha apuntado Aragonès. De momento, el vicepresidente no ha fijado un plazo en el cual se plasmará este aumento salarial en las nóminas de todos los trabajadores públicos y ha asegurado que hay «que «estudiar» con más detalle el impacto presupuestario antes de hacer público el calendario de aplicación.