Medio natural
Interior quiere sustituir a los vigías forestales por cámaras de videovigilancia
Los trabajadores contradicen los informes y afirman que las cámaras no pueden suplir su trabajo con eficacia
Interior quiere sustituir a los vigías forestales por cámaras de videovigilancia
El informe analiza la función de los vigías forestales, que desde los años 90 se sitúan en torres elevadas para detectar columnas de humo, posicionarlas debidamente al territorio, comunicarlas en la sala de control describiéndolas técnicamente e informar sobre la evolución del posible incendio. En este sentido, el estudio considera que la desestacionalización de los incendios (como consecuencia, sobre todo, del cambio climático) y el hecho de que la ciudadanía lleve encima teléfonos móviles han convertido el modelo en «insostenible».
El estudio recopilación que durante los últimos diez años se han producido un total de 10.000 avisos por incendios forestales y, de estos, sólo 37 los han hecho a los vigías forestales que hay repartidos por todo el país durante la campaña de incendios. También recoge que las torres actuales son «claramente ineficientes» porque las instalaciones no cumplen con los requisitos de prevención de riesgos laborales.
Los vigías forestales tuvieron conocimiento de este informe, fechado el 3 de febrero, a través de los representantes sindicales y ya han anunciado que no se quedarán de «brazos cruzados» por una propuesta que, consideran, supone «la eliminación» del cuerpo de vigías. De entrada, ha convocado una manifestación este martes anteel Departamento de Interior y también están trabajando en estudios propios para desmentir las cifras del informe.
Tan pronto como supieron que Interior propone sustituir a los vigías forestales por cámaras de videovigilancia, los vigías se empezaron a organizar a través de un grupo de whatsapp. Uno de los vigías, Enric Vernedas, en nombre del colectivo, defiende que desde los años 90 hacen su trabajo de manera «impecable» y asegura que las cámaras o los avisos ciudadanos «no podrán dar la información precisa y profesional» que dan ellos. Además, sostiene que decir que en diez años sólo han alertado de 37 columnas de humo «es una barbaridad que no se ajusta a la realidad».
El informe de la dirección general recoge la experiencia de la torre de vigía de Montserrat, con cámaras conectadas a las salas de control territorial, y asegura que el seguimiento de las columnas de humo con estas tecnologías se hace «muy satisfactoriamente». Según Interior, porque garantizan la cobertura los 365 días del año y «garantizan la inmediatez del seguimiento y evolución de una columna a cualquier hora y todos los días del año».
En Catalunya hay 48 torres de vigía y una plantilla máxima de 96 vigías. Según Vernedas, las cámaras pueden ser «un complemento» en el trabajo de los vigías sin embargo, en ningún caso, sustituirlos. «Enverano, la visibilidad a causa de la calina u otros factores atmosféricos puede ser mala y las cámaras se resienten mucho más que el ojo humano», exponen a los vigías que también ponen de relieve su trabajo a la hora de «filtrar la información». «Somos personal especializado y diferenciamos entre humo y polvo, ahorramos muchos recursos a la administración cada verano», ha destacado a Enric Vernedas.
Los vigías también critican que la dirección general ponga como argumento para eliminar la vigilancia el mal estado de algunas torres. «En diez años no han invertido pero es que, además, el informe recoge algunas situaciones que no son fieles a la realidad», ha dicho. «Nos resulta poco creíble y podemos desmentir los resultados», señalan los vigías.
Por eso, los vigías esperan que Interior haga marcha atrás y que no suprima un cuerpo que, defienden, es imprescindible para avisar de posibles incendios, sobre todo en aquellas masas forestales «poco pobladas y poco frecuentadas»: «Entendemos que no podemos dejar el bosque sin vigilancia esperando que haya algún visitante o excursionista en la zona».