Política
La familia Pujol denuncia en la Audiencia Nacional seguimientos y allanamiento de morada por parte del excomisario Villarejo
Personas con huellas clasificadas entraron en casa la exmujer de Jordi Pujol Ferrusola
«Huellas especiales»
La familia Pujol denunció los asaltos a los Mossos d'Esquadra, que inspeccionaron a fondo la vivienda. Las indagaciones, realizadas en colaboración con la Policía Nacional y la Guardia Civil, dieron como resultado «huellas especiales» en el interior del inmueble, que los Pujol piden ahora que sean desclasificadas por si coinciden con las de algunos de los mandos policiales investigados en el 'caso Villarejo'.
La familia Pujol ha aportado a la Audiencia Nacional, entre otras pruebas para acreditar este nuevo operativo parapolicial, la grabación en que Villarejo y el comisario Marcelino Martín Blas, ex responsable de Asuntos Internos, aludían a los «controles que estaba manteniendo la Policía Nacional a Jordi Pujol Ferrusola y en su entorno directo» y que nunca fueron comunicados al juez que en aquel momento instruía el caso Pujol en la Audiencia Nacional.
De esta manera, los Pujol atribuyen en l'»organització criminal» por la cual está siendo investigado Villarejo un operativo similar en el de la operación 'Kitchen' en qué Interior dispuso abundantes medios personales y materiales para arrancar de cuajo la documentación comprometedora que tenía oculta el extesorero del PP Luis Bárcenas. En el caso de Bárcenas ya se han acreditado seguimientos a su familia sin orden judicial, el robo e intercepción de sus teléfonos móviles o la entrada en algunos de los inmuebles en que custodiaban documentación.
«Sobre Jordi Pujol Ferrusola se practicaron multitud de seguimientos personales, se confeccionó documentación falsa, después aportada por particulares a la Fiscalía Anticorrupción, y se dio cobertura, a cargo de recursos públicos, a diferentes denunciantes espontáneos», señala el escrito dirigido al magistrado Manuel García Castelló. «Todo eso», añaden los Pujol, «por vías ajenas al conocimiento de la autoridad judicial y escapando a su fiscalización, en interés y lucro propios».
De Rosa, Victoria Álvarez, Cierco
En este sentido, el escrito de los Pujol asegura que «hay fundados indicios que algunos de los investigados y, particularmente, José Manuel Villarejo, actuando al margen de cualquier legalidad y sirviéndose de su condición de funcionario público, falsearon documentos de carácter mercantil, obtuvieron información de carácter íntimo respecto de Jordi Pujol Ferrusola y ofrecieron ventajas y cobertura económica y policial a diferentes testigos|testimonios para presentar declaraciones modeladas de signo pretendidamente incriminador», en referencia a las testificales prestadas al inicio del caso Pujol por el financiero Javier de la Rosa y la expareja de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez.
Entre las actuaciones supuestamente delictivas, los Pujol destacan la entrega por parte de la familia Cierco, propietaria de la Banca Privada de Andorra (BPA), a la Fiscalía Anticorrupción de un documento bancario supuestamente falso con el cual se pretendía vincular a la mujer de Oriol Pujol Ferrusola, Anna Vidal, con su cuñado Jordi con el objetivo de atribuir al exsecretario general de CDC «un papel de testaferro» de la familia.