Sanidad
China confía en tener la epidemia del coronavirus bajo control a finales de abril
Los especialistas afirman ahora que el país podría no ser necesariamente el origen del foco de la enfermedad
El prestigioso neumólogo Zhong Nanshan, jefe del equipo de expertos médicos de la Comisión Nacional de Salud de China, afirmó hoy que su país confía en tener el brote de coronavirus bajo control al fin del próximo abril.
«La Xina tiene la confianza en tener el brote bajo control, en términos generales, para finales de abril,» dijo Zhong en una rueda de prensa en Cantón, y añadió que, «aunque hubo un gran brote en Wuhan, este no se ha extendido masivamente a otras ciudades».
El especialista en enfermedades respiratorias indicó que el número de casos en China empezó a disminuir después del 15 de febrero: «Ya dijimos que el pico tenía que tener lugar a mediados o finales de febrero dada la fuerte intervención del Estado y por las cancelaciones de viajes después de las vacaciones del Año Nuevo chino».
Hasta hoy, el acumulado de muertos en China por el coronavirus se sitúa en 2.744 y el de casos confirmados, en 78.497, según el último balance ofrecido por la comisión, actualizado hasta la pasada medianoche hora local (16.00 GMT del miércoles).
Del total de casos confirmados, 43.258 continúan activos, un 5% menos. No obstante, entre estos pacientes hay 8.346, un 19,3%, que se encuentran en estado grave.
La buena noticia es que 32.495 personas han sido dadas ya de alta después de superar la enfermedad, un 9% más que el martes.
Zhong aseguró hoy que algunos pronósticos de expertos extranjeros, como China registraría más de 160.000 contagiados, «no tuvieron en cuenta la intervención del Gobierno chino».
«Nuestro equipo pronosticó alrededor de 70.000 pacientes infectados por el virus. Presentamos estas cifras a una publicación internacional, pero el documento no fue aceptado», aseguró.
También afirmó que China ahora tiene que mejorar la cooperación y compartir su experiencia con otros países» dado el rápido aumento de casos en países como Corea del Sur, Italia o Irán.
El epidemiólogo sorprendió al afirmar que, aunque la epidemia empezó a extenderse al país asiático, el primer caso de coronavirus pudo no haber pasado en China.
«Cuando realizamos nuestros primeros pronósticos, sólo pensábamos en China y no en otros países. Pero vemos que se están produciendo brotes en otros países. Aunque el brote empezara en China, no necesariamente significa que China fuera la fuente», afirmó.
Hasta hoy, las autoridades sanitarias chinas han realizado seguimiento médico además de 652.000 personas que tuvieron contacto próximo con los infectados, de los cuales más de 71.500 siguen en observación.
En la provincia de Hubei, foco de la epidemia, se han registrado 65.596 casos confirmados y 2.641 muertos , aunque el número de dados de alta sigue aumentando -2.288 pacientes curados en la última jornada- y se sitúa ya en 23.200.
Aunque más de una treintena de países cuentan con casos diagnosticados de COVID-19, China acapara más del 95% de los infectados.
Los síntomas de la nueva enfermedad son|están en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden estar acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultado para respirar).