Juidicial
Un juzgado de Girona pide al Supremo que investigue Puigdemont por irregularidades cuándo era alcalde
El expresidente cree que buscan su extradición «como sea» y recuerda que ya se ofreció a declarar
«Ellos sabrán por qué razones han decidido esperar a este momento. Yo tengo sospechas más sólidas que sus acusaciones. Buscan extradición como sea», ha concluido.
El foco de la investigación se centra al determinar si el Ayuntamiento de Girona utilizó fondos de la empresa mixta Aigües de Girona, Salt y Sarrià (Agissa) para adquirir el fondo de arte Santos Torroella. El consistorio, inicialmente, preveía pagar parte de las obras con el canon del agua. Aunque más adelante, y según ha sostenido siempre el Ayuntamiento, eso se desestimó y se optó por otras vías. La alcaldesa, Marta Madrenas, de hecho, ya aseguró que la colección de arte se está pagando con fondos propios.
El acuerdo para la adquisición del fondo Santos Torroella se cerró en el 2014 por un importe de 3,9 millones de euros (MEUR). En este periodo, y mientras se negoció la compra, Carles Puigdemont era alcalde de Girona. La operación, sin embargo, no estuvo exenta de polémica. Porque cuando pasó por pleno, granparte de la oposición votó en contra, y Puigdemont –que gobernaba en minoría- tuvo que utilizar su voto de calidad para que la aprobación saliera adelante.
La investigación sobre el expresidente de la Generalitat es una de las patas del conocido como caso Agissa, que investiga otras irregularidades en el seno de la empresa de aguas. Una investigación que tutela directamente la Fiscalía Anticorrupción, en el marco de la cual el mismo fiscal José Grinda y agentes de la Guardia Civil entraron en el Ayuntamiento de Girona en junio del 2018 para pedir expedientes relacionados con la adquisición del fondo de arte y la prórroga de la concesión del servicio de aguas (que se aprobó en el 2013).