Mémora y Àltima aplazan los funerales de personas muertas por covid-19 para minimizar el riesgo de contagio entre familiares
El entierro o la incineración del difunto sí que se hará y los parientes próximos podrán congregarse acabada la cuarentena
Estas compañías de servicios funerarios informarán a las familias sobre los protocolos necesarios a seguir y se las ofrecerá la posibilidad de realizar los funerales una vez acabadas las cuarentenas, señalan las mismas fuentes. Pasado este periodo, la familia podrá decidir la fecha de celebración del funeral, explica Àltima.
No hay ninguna evidencia de riesgo de infección de coronavirus a partir de personas contagiadas después de que hayan muerto. El problema podría ser el contagio entre familiares que habían sido en contacto con el difunto.
Desde de Àltima indican que esta es una situación inédita, aunque en 2014, con la alerta de Ebola, también se definieron unos protocolos especiales de actuación.
Posibilidad de streaming para reducir la asistencia masiva a los funerales
Los tanatorios dotados con equipos audiovisuales ofrecerán al resto de familias el servicio de grabar y emitir por streaming los funerales para «colaborar en la prevención de potenciales contagios al reducir la asistencia masiva se las ceremonias», señalan fuentes de Mémora. Este es un servicio que se ofrece desde hace años y que el grupo considera que en este escenario es «una buena alternativa preventiva».