La Generalitat pide al Estado que autorice el confinamiento de todos los catalanes en su casa
Se reduciría el transporte público al 10% y sólo se podrían desplazar al puesto de trabajo los servicios esenciales
Buch garantiza que herramientas como el gas pimienta son excepcionales y se utilizarán siempre con mediacio prevía
La propuesta de decreto de la Generalitat prohíbe la circulación de los ciudadanos a pie, en vehículo privado o en transporte público excepto en varios casos de servicios esenciales. Se trata de los servicios de producción, almacenaje, distribución y venta de alimentos, servicios de seguridad, emergencias y sanitarios, funcionarios de prisiones y justicia juvenil, servicios sociales, forenses, empresas funerarias, servicios meteorológicos, gestores de transporte, trabajadores de radios y televisiones en misión de servicio público, suministro de energía y agua, ópticas y ortopedias, telecomunicaciones, residuos, limpieza, industria química y suministros sanitarios. No podrían abrir los espacios comerciales públicos o privados que no estén dentro de estas categorías.
Paralos ciudadanos que no puedan salir a trabajar, podrán salir de forma individual a comprar alimentos y bebidas, medicamentos y combustible. Los desplazamientos serán individuales, excepto en el caso de menores y personas dependientes, y serán del mínimo tiempo imprescindible. Las restricciones durarían 15 días, prorrogables en función de la evolución de los datos epidemiológicos. El incumplimiento comportaría sanciones.
Buch ha criticado que el gobierno español haya optado por «subordinar» en vez de «cooperar», y ha asegurado que la propuesta de la Generalitat está hecha por técnicos y médicos, «no tiene ideología política». Por eso, cree que ahora «no es la hora de proclamas ideológicas y patrióticas», sino de «medidas reales y efectivas».
Por su parte, Vergés ha afirmado que los profesionales sanitarios son los «grandes héroes» en la pandemia y considera que la sociedad ha entendido que se tiene que proteger y cuidar el sistema sanitario y otros servicios esenciales con muestras como los aplausos desde los balcones. Ahora bien, la consellera ha insistido en la necesidad de que las personas se queden en casa para reducir los contactos y que siga las recomendaciones, como lavarse las manos a menudo o toser tapándose la boca con el antebrazo. Vergés ha remarcado que este lunes empieza el inicio de un ensayo clínico en Cataluña con el objetivo de parar las cadenas de transmisión del coronavirus y que los resultados del cual se esperan en 21 días.
La titular de Salut se ha mostrado satisfecha de cómo ha reaccionado la población de la Cònca d'Òdena en el confinamiento que se decretó el jueves y ha situado su respuesta como «ejemplo» a seguir para los próximos días. Vergés ha apuntado que aquella medida contundente «está funcionando» ante el brote que afecta de forma importante a esta zona.