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Salou se opone firmemente a realojar a 17 familias de Campclar

Fuentes del Departament d’Habitatge han confirmado que estaría en el municipio salouense donde irían estos ciudadanos que sufrieron un incendio, recientemente, en sus viviendas

El alcalde de Salou, Pere Granados, durante un pleno

Salou, encabeza la alcaldía con mayor retribución económica en la demarcaciónACN

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El alcalde de Salou, Pere Granados, se opone al realojamiento de 17 familias de Campo Claro en Salou, en las cuales, recientemente, se les han quemado varias viviendas, distribuidas en dos edificios, «si la Generalitat no nos garantiza que han superado, satisfactoriamente, una prueba previa, PCR, para descartar el coronavirus».

La directora de Vivienda ha confirmado al alcalde salouense que estos ciudadanos se realojarán en Salou, pero Pere Granados es totalmente contrario a esta decisión, porque «mientras no les hagan la prueba del coronavirus para evitar un foco de contaminación vírica importada por residentes de otro municipio, pondrán en riesgo la salud de nuestros convilatans y convilatanes, y también de las personas que viven en el inmueble, que son vulnerables».

El alcalde ha tildado esta imposición de la Generalitat como «de irresponsable», aparte que «contradice los propios criterios del organismo, con respecto a evitar desplazamientos».

Hay que decir, también, que la Comunidad de Propietarios del inmueble que los tendría que acoger en Salou está «absolutamente en contra» de la llegada de las 17 familias de Campo Claro.

Ana Lorente, la vocal del edificio Bahía Dorada de Salou ha destacado en esta redacción que los vecinos de Campo Claro «romperían el orden de confinamiento» implantado ahora mismo por todo el Estado español. En total, se estima que el número total de personas que se tendrían que trasladar al edificio es de más de una cincuentena y Lorente afirma que «eso supone un gran riesgo por todo el edificio sobre todo si se tiene en cuenta que aquí tenemos gente que son de riesgo».

La vocal asegura que están en contacto con el Ayuntamiento de Salou -que también se ha opuesto a la llegada de las 17 familias- con el fin de buscar una solución porque «no sólo es un problema para los que vivimos en el edificio sino también para toda la población de Salou» en la que podrían exponer cuando salgan a hacer sus compras.

Lorente asegura que no tendrían «ningún problema» al recibirlos si se garantizara que ninguno de ellos tiene Covid-19 después de haberse hecho el test correspondiente. Según la vocal, una inmobiliaria ha sido quien ha ofrecido el edificio a las familias de Campo Claro y, desde la comunidad del edificio, denuncian que en ningún momento se los advirtió o pidió opinión.

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