Agricultura permitirá la caza cuando se detecten o prevean daños en el campo causados por animales salvajes

En este sentido, el Departamento acepta que el campesinado afectado solicite una autorización excepcional de control de la especie cuando el campesino o el ganadero sufra o prevea que sufrirá daños severos. En caso de que el afectado sea cazador podrá llevar a cabo las actuaciones para la protección de los cultivos dentro de sus fincas, tal como reclamaba el sindicato. Las actuaciones de los agentes rurales también podrán llevarlas a cabo cazadores del Área Privada de Caza donde esté ubicada la parcela con daños si son de la zona y cumplen las medidas sanitarias establecidas.

Otra de las peticiones del sindicato aceptada por Agricultura es la activación de las autorizaciones excepcionales preventivas emitidas antes de la declaración del estado de alarma y que habían quedado suspendidas, como es el caso del Parque Agrari del Baix Llobregat. También que el Departamento llevará a cabo actuaciones de oficio en zonas de elevada densidad y riesgo de daños en el caso del jabalí, o incluidas en olas con muchos daños constados por la administración.

Unió de Pagesos pide que las solicitudes se tramiten con rapiñadas y que las condiciones de las autorizaciones permitan hacer las actuaciones «con el método y número de cazadores necesarios para que sean eficaces».

El sindicato avisa de que la situación empeorará

El sindicato señala que hay que tener presente que la situación de los daños de fauna en los cultivos irá empeorando a medida que adelante el desarrollo de estos. En el caso de la cereza, indican que ya hay daños de estorninos y urracas, y en algunas zonas, de jabalíes. Mientras, los cultivos de huerta sufren daños de palomas torcaces, y los árboles jóvenes y los brotes tiernos de fruteros y viña de toda Cataluña, de corzos, especialmente a la Terra Alta, la Ribera de Ebro, el Priorat, el Bages, el Penedès y la plana de Lérida. En el caso de la viña, Unió de Pagesos calcula que los daños suponen el 100% de pérdida de la cosecha.

Asimismo, avisan de que los jabalíes también provocan daños a otras zonas frutales como el Alt Penedès y la plana de Lérida, y de huerta, como el Baix Llobregat. Con respecto a los conejos, han notado un aumento de daños en los cultivos del Segrià, las Garrigues, la Noguera y la Segarra, el Baix Penedès (viña) y las Tierras del Ebro (naranjos). En lugares como la zona de Vilada (Berguedà) sufren daños de ciervos.

Unió de Pagesos también recuerda que las comarcas de Gerona son las que sufren más daños de jabalíes desde hace muchos años, hasta el punto que la población de estos animales está descontrolada. Ahora, con las prácticamente nulas intervenciones llevadas a cabo el último mes, «han saltado todas las alarmas en muchos puntos», ya que según han añadido los jabalíes no sólo afectan a los cultivos como cereales, raigràs y zonas de pasto sino que provocan daños en la colza, que años atrás se salvaba. En comarcas como el Ripollès y la Garrotxa los cereales también sufren daños de corzos y gamos.