Priorizar teletrabajo, desinfección continua y cambios de horarios: medidas de seguridad en el trabajo en la fase 1

El titular de la actividad económica o el director de centros educativos y entidades tendrá que asegurarse que todos los trabajadores tengan «permanentemente a su disposición» geles o desinfectantes para limpiarse las manos y, cuando no sea posible, agua y jabón. En caso de que las empresas no puedan garantizar la distancia de seguridad de dos metros entre trabajadores, la compañía tendrá que proveerlos de equipos de protección de individual.

El texto dispone que el fichaje por huella dactilar tiene que ser sustituido por cualquier otro sistema de control si no se puede desinfectar cada vez que se utiliza. Los empresarios estarán obligados a organizar los turnos y los espacios para garantizar la distancia mínima de dos metros entre el personal en el centro de trabajo, incluyendo los vestuarios, taquillas, lavabos o cualquier zona de uso común.

Cuando un trabajador tenga síntomas compatibles con la covid-19 tendrá que abandonar el trabajo, si se puede llevando una mascarilla. La empresa tendrá que contactar con el teléfono habilitado para atender los casos de coronavirus a cada comunidad autónoma o centro de salud correspondiente y con los servicios de prevención de riesgos laborales. El trabajador no tiene que volver al trabajo hasta que no reciba atención médica.

Con el fin de evitar el riesgo de «coincidencia masiva» de personas, las direcciones tendrán que cambiar la organización horaria en las franjas horarias con máxima afluencia o concentración de trabajadores. En concreto, el ministerio pone especial énfasis a decir que se respeten las distancias de seguridad en las entradas y salidas al trabajo y que se saquen adelante las modificaciones necesarias para limitar los contactos.

Una vez entrados en la fase 1, las empresas tendrán que limpiar y desinfectar sus centros de trabajo, prestando especial atención en las zonas de uso común y a las superficies de contacto más frecuente como mangos de puertas, mesas, muebles, tierras o teléfonos, etc. El BOE especifica que se tendrán que utilizar diluciones de lejía o desinfectantes con actividad viricida autorizados y tirar todos los materiales utilizados. Después de limpiar, será obligatorio lavarse las manos.

Las medidas de limpieza también se tendrán que aplicar a las zonas privadas de los trabajadores como vestuarios, taquillas, lavabos, cocinas o áreas de descanso. Los puestos de trabajo compartidos entre más de un empleado se tendrán que desinfectar cada vez que se utilicen. Por otra parte, los uniformes y ropas especiales para ir al trabajo se tendrán que lavar cada día a una temperatura de entre 60 y 90 grados. Los trabajadores que estén en contacto con clientes o visitantes también tendrán que lavar la ropa que lleven cada día.

Por otra parte, las instalaciones se tendrán que ventilar de forma diaria y durante cinco minutos como mínimo. En los casos que el centro disponga de un ascensor o montacargas, se limitará su uso al "mínimo imprescindible" y se restringirá el empleo a una persona, excepto los casos en que se necesite asistencia.

Las normas de limpieza que impone el BOE obligarán los establecimientos con lavabos de uso para clientes, visitantes o usuarios a limpiarlos y desinfectarles seis veces al día. El empleo máximo será de una persona, siempre que no necesite la asistencia de un acompañante.

Siempre que sea posible, el gobierno insta a las compañías a fomentar el pago en tarjeta y a evitar el dinero en metálico. Para asegurar las medidas de higiene, se pide que se limpien y desinfecten los datáfonos después de cada uso. El ministerio también recuerda a las empresas que tendrán que colocar papeleras donde se puedan echar los pañuelos y material de un solo uso utilizado.