Crece el interés de las iglesias por los datáfonos con forma de atriles y huchas por recaudar donativos con tarjeta

Los obispos hablaron de la caída de los ingresos en la última reunión de la Conferencia Episcopal Tarraconense, donde ya acordaron ponerse a buscar donativos por internet para afrontar el sostén económico de las iglesias de Cataluña.

«Cuando entramos en una iglesia allí detrás hay una serie de gastos de limpieza, electricidad... que quizás no se ven a simple vista pero que sueño», ha expuesto a Albert Pujol-Xicoy del Banc Sabadell. Explica que por eso el interés de los templos y otras entidades al renovar el sistema para facilitar los donativos ha crecido. Hay parroquias que se han interesado por poner, otros que quieren tener más de uno y hasta han incorporado nuevos clientes con este servicio.

El total de las aportaciones ha bajado durante el confinamiento, pero «quien se ha acercado y ha hecho su aportación ha entendido que este es un momento complicado y ha expresado el compromiso con su parroquia» incrementando en 3,5 euros el donativo medio, que ha pasado de 9,18 a 12,58 euros, expone Pujol-Xicoy. Antes del confinamiento la tendencia mensual desde noviembre del 2018 ya era de crecimiento pero las últimas semanas ha dado un salto.

El sistema garantiza «la higiene personal», destaca Pujol-Xicoy. Pero apunta otro motivo para utilizarlo, que es que las donaciones son muy superiores si se hacen con tarjeta que con metálico. «Cuándo quieres hacer una donación y la haces realmente con la cabeza y el corazón ahora ya no depende de lo que tienes en el bolsillo», argumenta. «Los sistema favorece la corresponsabilidad de la persona», remacha.

El servicio ofrecido no deja de ser un datáfono, pero con un determinado «envoltorio». La diferencia con otro datáfono es que no saca ticket y el importe no puede sobrepasar el máximo permitido sin poner el número secreto para agilizar el proceso, que en la actualidad son 45 euros. En el caso del Sabadell el 60% de los datáfonos están en atriles, el 35% en huchas y el resto en lampadarios. Los 75 templos con este sistema están muy repartidos por toda la geografía catalana.

El «cajón de limosnas digital» de La Caixa sigue el mismo sistema. Fuentes de la entidad explican que con la integración de bizum el donante puede hacer la limosna también cuando llegue a su casa. Esta entidad ofrece el servicio en menos templos pero quizás más emblemáticos, como los monasterios de Montserrat o Poblet, la Catedral de la Seu d'Urgell u oficinas de Càritas de Barcelona.