Salud
Una combinación de inmunoterapia y quimioterapia se muestra eficaz en el tratamiento del cáncer de páncreas
El uso de dos fármacos sumado al tratamiento químico consigue aumentar la supervivencia general de 3,3 a 7,8 meses
Según Macarulla, que hay que ser «cautos» porque la investigación incluía a un número «modesto» de pacientes. Con todo, asegura que el resultado es «prometedor» y les permite desarrollar la inmunoterapia para el tratamiento del cáncer de páncreas.
«Los resultados demuestran que se ha conseguido tanto una tasa de respuesta importante como una duración de esta respuesta más alta de la esperada», añade.
Cambiar la biología del tumor
En el ensayo COMBAT los pacientes reclutados ya habían recibido como mínimo un primer tratamiento de quimioterapia para tratar el cáncer de páncreas y se le mostraban refractarios.
Como otros ensayos de inmunoterapia se habían demostrado ineficaces en el tratamiento de estos tumores, se optó por «cambiar la biología del tumor», en palabras de la doctora Macarulla, para tener un ambiente más «favorable» para responder a la inmunoterapia. Por eso se han combinado dos estrategias de inmunoterapia con la quimioterapia.
En el ensayo se combinó pembrolizumab -un fármaco que se une a la proteína PD-1, que se encuentra en las células T, cuyo bloqueo ayuda al sistema inmunitario a destruir las células cancerosas– con BL-8040, un antagonista del CXCR4 que promueve la infiltración de las células T en el tumor.
Los datos obtenidos sugieren, de acuerdo con la doctora, que el bloqueo del CXCR4 y la PD1 puede aumentar el beneficio de la quimioterapia en el cáncer de páncreas y justificar la confirmación en un ensayo randomizado posterior.
El mes de enero pasado la Agencia Europea del Medicamento designó el fármaco BL-8040, uno de los dos utilizados en el estudio, 'huérfano', una designación que se obtiene en aquellos medicamentos que parecen prometedores en tumores para los cuales hay una necesidad de alternativas terapéuticas.
Cáncer de páncreas
El cáncer de páncreas es un tumor que en la actualidad sigue teniendo un pronóstico pobre, con una tasa de supervivencia a los cinco años inferior al 10%. La falta de mejora en la supervivencia y el aumento en su incidencia en los últimos años han hecho que las predicciones sitúen el cáncer de páncreas como responsable de la segunda causa de muerte por cáncer en los Estados Unidos el año 2030.
En España en 2018 ya hubo más muertes por cáncer de páncreas que por cáncer de mama, y fue la tercera causa de muerte por tumor más frecuente.
A pesar de los esfuerzos dedicados a la investigación en el cáncer de páncreas, hay pocos tratamientos activos para tratar a los enfermos, y hasta este momento ninguno basado en la inmunoterapia había conseguido obtener resultados.
«Es muy importante seguir desarrollando nuevas alternativas de tratamiento, sobre todo si tenemos en cuenta que la incidencia de este tipo de tumor no ha dejado de crecer en los últimos año», concluye Teresa Macarulla.
El Dr. Manuel Hidalgo, del Hospital Cornell de Nueva York (Estados Unidos), es quien lo ha dirigido el estudio. En España además del Campus Vall d'Hebron también han participado la Clínica Universitaria de Navarra, el Hospital Gregorio Marañón, el Hospital La Paz y el Hospital de Fuenlabrada, los tres de Madrid.