Diari Més

Judicial

La defensa de Trapero responsabiliza a De los Cobos del fracaso policial el 1-O

La abogada Olga Tubau dice que todo el mundo sabía que los Mossos no querían que se hiciera el referéndum

La abogada de Trapero y Laplana, Olga Tubau, durante su intervención en el juicio de la Audiencia Nacional.

La abogada de Trapero dice que Guardia Civil y CNP quieren que se lo condene por «restablecer» su imagen del 1-OACN

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La abogada de Josep Lluís Trapero, Olga Tubau, ha responsabilizado este miércoles al coordinador del dispositivo policial del 1-O, el teniente coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, del «fracaso» del operativo para impedir el referéndum. Según Tubau, De los Cobos tenía que coordinar los tres cuerpos policiales, pero no se quejó previamente del dispositivo previsto por los Mossos y tampoco pidió tener el mando único. También ha recordado que quien iba a las reuniones de coordinación en nombre de Trapero, el comisario Ferran López, fue designado jefe del cuerpo durante la aplicación del artículo 155. Además, ha recordado que todo el mundo en Cataluña sabía que los Mossos no querían que el referéndum se hiciera.

En su segundo día de informe final en el juicio en la Audiencia Nacional, Tubau se ha centrado en intentar desacreditar el testimonio de De los Cobos, que mantuvo un enfrentamiento público y abierto con Trapero y ha testificado contra él varias veces. Así, como ya dijo este martes, considera que el dispositivo policial para frenar la votación de más de 2 millones de personas fue un «fracaso» y que el máximo responsable de este dispositivo era De los Cobos.

La letrada ha explicado que cuando Trapero mostró discrepancias con De los Cobos la cúpula de los Mossos decidió que a las siguientes reuniones asistiera su número 2, Ferran López, que no recibió ninguna queja y que ya era conocido por los otros responsables policiales y de fiscalía. «¿Se puede sostener que López engañó y traicionó y fue nombrado como responsable de los Mossos?», se ha preguntado.

También ha recordado que cuando la Consejería de Interior denunció públicamente que los Mossos habían quedado intervenidos por el gobierno español con el nombramiento de De los Cobos, la jefatura del cuerpo hizo una nota pública inédita donde se desmarcaba de estas afirmaciones, asegurando que la policía catalana mantenía sus competencias, a pesar de mostrar el desacuerdo con el nombramiento del coordinador. Eso supuso que la inmensa mayoría de los medios de comunicación, fueran de la ideología que fueran, evidenciaran las discrepancias entre el cuerpo y la cúpula política de Interior. Por eso, considera que nadie mínimamente bien informado podía afirmar que los Mossos estaban al lado del Gobierno para permitir el referéndum.

De la reunión de los tresjefes policiales en el despacho de la magistrada del TSJC Mercedes Armas, Tubau ha recordado que Trapero pidió un matiz en el auto del 27 de septiembre y Armas le hizo caso con el fin de aclarar las funciones de cada cuerpo.

En este sentido, ha dicho que el auto del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) obligó a los cuerpos policiales a intentar mantener cerrados los más de 2.000 colegios electorales. Según Tubau, tenía sentido que los primeros enintentarlo fueran patrullas de seguridad ciudadana de los Mossos, que están más cerca del territorio y que podían generar menos reticencias que la Policía Nacional o la Guardia Civil. Este plan , explicado por los Mossos a De los Cobos, no fue rebatido por ninguno de los otros cuerpos policiales, ha recordado.

Por eso, Tubau ha dicho que si De los Cobos no conocía los planes concretos de los Mossos, entonces no podía coordinar los tres cuerpos. De hecho, también ha recordado que el comisario Ferran López ofreció a De los Cobos y a los otros mandos de la Guardia Civil y la Policía Nacional estar presentes en el Cecor central de los Mossos durante la jornada del 1-O, cosa que los mandos estatales rechazaron.

Tubau ha defendido que las pautas de actuación de los Mossos eran correctos, acordadas por la cúpula policial, no soloTrapero, y no se dieron órdenes secretas contrarias a las pautas y favorables al referéndum, puesto que hubiera estado imposible de ocultar en un colectivo de 17.000 personas. Tampoco ve probado que las pautas se hicieran públicas porque la ciudadanía se organizara en contra de la actuación policial. De hecho, las pautas preveían resistencia pasiva, no activa de la ciudadanía. De hecho, el mandamiento judicial tenía que combinar el cierre de los centros con el uso de la fuerza policial de forma congruente, oportuna y proporcional, sin priorizar el objetivo sobre las formas ni a la inversa, según la abogada.

Sobre la iniciativa 'Escoles obertes', ha dicho que los tres cuerpos vigilaron los centros, y ni Guardia Civil ni Policía Nacional cerraron ningún centro o denunciaron que los Mossos no lo hicieran.

Además, durante el mismo 1-O, De los Cobos, a pesar del supuesto «engaño» de Trapero con el dispositivo de los Mossos, no pidió tener el mando único de los tres cuerpos, incluida la policía catalana. Eso, para Tubau, demuestra que los planes de los Mossos no eran fraudulentos.

La abogada también ha hablado de la reunión deTraperoy DelosCobos el mismo 1-O con la magistradaArmas. En este sentido, se ha preguntado si es creíble queTraperopidiera la reunión si sabía que estaba desobedeciendo las órdenes de la magistrada. Además, en aquella reunión, DelosCobos no se quejó de la actuación de los Mossos a la magistrada, y durante todo el día la comunicación entre el comisario Ferran López y los cuerpos estatales fue fluida y sin reproches. Además, ha dicho que la magistrada MercedesArmas, que tiene un «talante riguroso» no activó ningún mecanismo en su momento para «revertir la voluntad de no cumplir, como invoca el ministerio fiscal».

Actuaciones policiales el 1-O

Cuando

se vio que la coordinación estaba rota, los Mossos «no se encontraban en una situación precaria, sino lamentable», puesto que era imposible ejercer la fuerza policial en todos los centros de votación.

Aun así, mientras la Guardia Civil y la Policía Nacional, con cerca de 6.000antiavalots, cierran 101 centros durante la mañana del 1-O, sin garantizar que no se reabrieran por la tarde, los 900antiavalotsy los otros 6.000 agentes de los Mossos consiguieron cerrar unos 370 centros. Aun así, ha asegurado que ninguno de los tres cuerpos pudo cerrar y desalojar definitivamente ningún centro. «Es lamentable, pero no fue posible cerrar más», ha admitido, pero ha añadido que esto no puede hacer recaer toda la responsabilidad solo en los Mossos.

En todo caso, ha vuelto a admitir que quizás alguna actitud individual de algún mosso podía no ser correcta aquel día, pero considera que no se puede condenarTraperopor este hecho, porque no hubo ninguna orden de él para tener aquellas actuaciones sospechosas o por inacción. Además, ha recordado que ninguno de estos agentes ha sido citado a declarar durante el juicio ni ha sido denunciado por la Policía Nacional o la Guardia Civil, y muchos han sido expedientados por la División de Asuntos Internos. En un sentido similar ha opinado que algunas comunicaciones por radio, correos electrónicos o consultas de matrículas no tuvieron ninguna voluntad de hacer seguimientos en los cuerpos estatales.

En el tramo final de su informe, Tubau ha pedido formalmente la absolución deTraperoyLaplana. Sobre la segunda ha dicho que no existía ningún requerimiento previo «directo o indirecto» y que jurídicamente la acusación de desobediencia no se sostiene. El mismo ha dicho deTrapero. La letrada ha asegurado que «todo el que se ha dicho impide llegar a la conclusión que ha habido una desatención dolosa».

Sobre el 20-S, la abogada ha recordado que el juez de instrucción 13 de Barcelona pidió a la Guardia Civil que le llevara delante suyo a cualquier mossoque obstaculizara el cacheo de la sede de Economía, y el instituto armado no lo hizo.

Tubau ha acabado su intervención afirmando, visiblemente emocionada, que «un ciudadano del pueblo libre no tiene que expiar las faltas que no son suyas ni ser víctima de la impotencia ni egoísmo del Estado». «Esto es algo que los tribunales pueden evitar y les pido que lo eviten con una sentencia absolutoria», ha añadido.

La sesión de este miércoles continúa por la tarde con los informes finales de las defensas de Cèsar Puig yPere Soler y el último turno de palabra, que previsiblemente no usará ninguno de los acusados.

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