Fronteras
España reabre este domingo las fronteras con la UE después de tres meses de restricciones
El gobierno español levanta los controles en la Jonquera, pero no permitirá la conexión con Portugal hasta el 1 de julio
El cierre de Europa
El 16 de marzo España impuso controles fronterizos terrestres temporalmente por la crisis del coronavirus, de manera tal que hasta ahora sólo podían entrar ciudadanos españoles, residentes en el Estado español, trabajadores transfronterizos o a aquellas personas que acreditaran documentalmente razones de bastante mayor. También suspendió las conexiones aéreas, ferroviarias y marítimas.
En aquel momento, al menos seis estados de la Unión Europea, como Dinamarca o Polonia, habían hecho lo mismo. Con el paso de los días, más países fueron cerrando sus fronteras hasta que prácticamente todo el bloque había suspendido la libre circulación en el espacio Schengen.
Este cierre generalizado se hizo en contra del criterio de la Comisión Europea que desde el principio defendió que era una medida innecesaria y poco efectiva para contener la propagación del coronavirus. Sin embargo, al ver que los ciudadanos no se podían mover con libertad en territorio europeo la CE recomendó a los estados que cerraran las fronteras externas de la UE.
Así, desde el 17 de marzo a todos los estados del club europeo, excepto a Irlanda, está prohibida la entrada desde terceros países. Un cierre que generó un alud de repatriaciones de centenares de miles de europeos atrapados en el extranjero. Durante semanas España recibió quejas por las dificultades que tenían algunos ciudadanos por volver, sobre todo aquellos que se encontraban en Sudamérica.
Confusión sobre la reapertura
En plena descebada interna, el gobierno español ha ido cambiando sus planes de reapertura de fronteras generando una cierta confusión. Si bien hasta el último momento los planes de Moncloa eran mantener el cierre hasta el 1 de julio, hubo anuncios después rectificados sobre un adelanto que, finalmente, y después de una fuerte presión de Bruselas, se produjo.
También ha sido confusa la coordinación con sus países vecinos, Portugal y Francia. Por ejemplo, Francia quería abrir el 15 de junio pero lo ha alargado hasta este domingo para coordinarse con España.
Por su parte, el gobierno portugués incluso se quejó al ejecutivo de Sánchez para no informarle del anuncio de la ministra Reyes Maroto sobre la reapertura de fronteras el 22 de junio. El gobierno español tuvo que rectificar a la ministra. Finalmente cuando decidió definitivamente levantar controles el 21 de junio, España hizo una excepción con Portugal con quien ha acordado hacerlo el 1 de julio.
Dudas sobre la cuarentena
Entre las medidas restrictivas para entrar en España, la cuarentena ha destacado como una de las más polémicas. El gobierno español decidió imponerla para todos los viajeros que llegaran al Estado durante el periodo de desconfinamiento, generando quejas del sector turístico que temía que la medida desincentivara la futura llegada de turistas.
Con la apertura de fronteras este domingo, el gobierno español también levantará la cuarentena. Un autoaislamiento que los pasajeros que han ido llegando esta semana no tendrán que cumplir tampoco en su totalidad. El viernes los viajeros que llegaban al aeropuerto del Prat se encontraron con que sólo era obligatorio hacer 3 días de cuarentena y no 14.
Por ahora, España sólo mantendrá la cuarentena obligatoria para los viajeros provenientes del Reino Unido donde también se aplica esta medida.
El gobierno de Pedro Sánchez ha avisado de que no tiene previsto levantarla si no hay «reciprocidad». Las autoridades británicas han asegurado que el ejecutivo español los tiene en cuenta por esta desescalada fronteriza, pero según la ministra española de Exteriores, Arancha Gonzalez Laya, todavía están negociando con Londres como hacerlo.
«Mantendremos un diálogo con el Reino Unido para determinar si tendría que haber reciprocidad», dijo esta semana a la BBC.
Gran parte de la UE reabierta
La mayoría de países de la UE ya tienen sus fronteras internas abiertas desde el 15 de junio, mientras una minoría de estados, como España, lo han hecho más tarde. Alemania, Francia, Bélgica o Grecia levantaron ya sus restricciones para los viajeros de la UE a mitades de mes e Italia lo hizo a principios de junio.
Seguían así las directrices de Bruselas que apostaba por la reapertura interna a mitades de mes, ya que considera que todos los estados tienen una situación epidemiológica similar y que los controles no son necesarios.
A partir de julio, el ejecutivo europeo quiere que se empiecen a levantar de manera gradual las restricciones para entrar en la UE. Los estados tendrán que elaborar una lista de terceros países desde donde se podrá empezar a volar en el viejo continente a partir del 1 de julio en función de su situación epidemiológica y la respuesta de las autoridades.
Bruselas recomienda de entrada incluir Albania, Bosnia, Kosovo, Montenegro, Macedonia del Norte y Serbia en este listado porque considera que su situación es similar o mejor». Ahora bien, algunos países como Grecia y Chipre han avanzado la reapertura de fronteras externas. Por ejemplo, Atenas ya acepta viajeros provenientes de Australia o Israel.
Dificultades para restablecer la circulación aérea
La reapertura de fronteras permite en el sector aéreo restablecer sus vuelos pero, después de tres meses parados y con una demanda incierta de pasajes para los próximos meses, las aerolíneas tienen dificultades para operar de manera normal.
La Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Área (Eurocontrol) prevé que al principio de julio sólo operen el 30% de los vuelos habituales por la época del año en Europa. Sin embargo, Eurocontrol asegura al ACN que las previsiones de vuelos «cambian regularmente».
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La situación es fluida», remarcan fuentes del ente.
Ahora mismo operan en Europa entorno unos 7.000 vuelos diarios, lo que representa un 80% menos que en el mismo mes del año pasado. Eurocontrol calcula que a finales de junio se llegará a los 10.000 vuelos diarios y «gradualmente» a los 13.000 durante la primera mitad de junio. Eso representa un 30% del tráfico habitual en el mismo periodo del 2019, según indica un reciente documento de la organización.
«La vuelta a la normalidad en la aviación está muy lejos a pesar de la reapertura de fronteras», afirma al director general de la 'Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) Alexandre Juniac. Desde el sector alertan de que no hay «signos» de un retorno a unos niveles de demanda y de actividad «sostenibles» para las aerolíneas.