Trabajo en grupos reducidos y castells sin 'pinyes', los consejos para reanudar los ensayos castellers

Son consejos que tendrán que recibir el visto bueno de la Generalitat, remarca la CCCC, que plantea seis pautas básicas a seguir: crear grupos estables de un máximo de 40 personas, no introducir nuevos participantes, no hacer pruebas con 'pinya' cerrada, hacer un registro estricto de los asistentes, llevar mascarilla y marcar un tiempo máximo de cinco minutos para cada castillo con una duración máxima de una hora por ensayo. A estos ítems, se añaden indicaciones de limpieza y desinfección.

Las recomendaciones son para un periodo de quince días, con previsión de flexibilizarlas a medida que se reduzca la posibilidad de contagio, hasta que se pueda reencontrar todo el grupo. Fuentes de la CCCC remarcan que son consejos dirigidos a aquellas entidades que han mostrado interés al volver a hacer castells, y aseguran que son pautas «para trabajo técnico» ya que consideran que «todas las limitaciones que hay que seguir no encajan con el concepto de ensayo que tiene el mundo casteller».

En este sentido, recuerdan que hay muchos grupos que se basan en el principio de 'si el último castelllo hicimos todos, el primero también lo haremos todos juntos', de manera que no prevén volver a la actividad hasta que puedan celebrarse ensayos sin limitaciones. La CCCC avisa de que eso se puede alargar hasta «que se encuentre una vacuna, un tratamiento efectivo o bien se dé por finalizada la pandemia». En este caso, se invita a los grupos a reanudar las actividades de cariz más social.

Los Castellers de Vilafranca, a punto para volver

El primer grupo que ha hecho público su retorno al local de ensayo son los Castellers de Vilafranca. Los Verds aseguran que internamente elaboraron un protocolo que ha precedido los consejos redactados por la CCCC. En todo caso, las pautas básicas son coincidentes, y los Castellers de Vilafranca prevén volver a ensayar «en breve», a la espera de fijar una fecha concreta.

La previsión es crear cuatro turnos de 40 personas, donde habrá miembros del tronco y castellers que vigilarán la estructura. Los Verds quieren centrarse en hacer castillos limpios de 5 o 6 pisos, «que en teoría no tienen riesgo de caer», apunta al presidente de la entidad, Carles Mata. Antes de empezar los ensayos, explica, se registrará la temperatura de cada asistente y los grupos de cada turno serán fijas para poder y aislar los miembros si hubiera un caso de contagio de la covid-19.

Al mismo tiempo, todos los castellers del tronco tendrán que lavarse con gel hidroalcohólico las manos, los brazos y los pies antes y después de cada construcción, y será obligatorio que todos los asistentes lleven mascarilla. Mata confía en que eso no será un inconveniente. «Lo tenemos que probar y, si vemos que es inviable, lo dejaremos correr», dice, mientras defiende la necesidad de volver a reunir al grupo para ensayar «para no estar desprevenidos el día que se pueda volver a las plazas».

Sobre la reanudación de las actuaciones, ve «complicado» levantar castells este año, pero no descarta que el grupo impulse una festividad con construcciones pequeñas limpias, como las que trabajarán ahora a los ensayos. El presidente de los Verds cree que sería una opción a valorar de cara a la festividad de Sant Fèlix. Más escéptico se muestra, en cambio, de cara al Concursde Castells de Tarragona, el cual ve «muy difícil» que se pueda celebrar.

Los grupos vallenses, a la espera de un retorno cumplido

En el lado opuesto de la reanudación de los Castellers de Vilafranca está la opinión de numerosos grupos que se niegan a volver al local de ensayo hasta que lo pueda hacer todo el grupo. Es el caso de las dos colles de Valls, la Colla Vella dels Xiquets de Valls y la Colla Joves Xiquets de Valls, se muestran partidarias de esperar a que pueda haber todos los miembros de la entidad en la piña. Los dos caps de colla ven muy complicado que esta temporada haya castells, aunque no pierden la esperanza.