Las residencias de ancianos de Catalunya tendrán que hacer cada día un control epidemiológico
Asuntos Sociales retira cautelarmente en Eulen la gestión de dos residencias de Barcelona
Las residencias de ancianos de Catalunya tendrán que realizar a partir de ahora, cada día, un control clínico y epidemiológico del virus de la COVID-19 a todos los trabajadores y residentes del centro para controlar los contagios y detectarlos de manera precoz.
El comité Procicat de la Generalitat ha aprobado el llamado 'Plan sectorial de retorno a la normalidad en el ámbito residencial', documento que, según ha informado el Govern, fija también que las visitas a residentes se hará con cita previa y que los ancianos podrán, siguiendo determinadas pautas, ausentarte del centro para ir de vacaciones o para visitar a familiares.
El plan abre también la posibilidad de que las residencias acepten nuevos ingresos, pero en este caso los nuevos residentes tendrán que haber pasado en las últimas 48 horas una prueba PCR de detección del coronavirus con resultado negativo y permanecerán en aislamiento diez días.
Expedientes por irregularidades
Por otra parte, el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias ha decidido retirar cautelarmente la gestión a Eulen de dos residencias de ancianos de Barcelona. Los centros Bertran Oriola i Mossèn Vidal y Aunòs tienen expedientes sancionadores abiertos por varias irregularidades detectadas durante la emergencia sanitaria, tanto en su gestión como en la atención a usuarios. Las dos residencias fueron intervenidas por la Generalitat al detectar irregularidades en el funcionamiento y organización del servicio y se sustituyó temporalmente Eulen por otra empresa gestora. Ahora que la situación está controlada en los dos centros, el Departamento ha decidido suspender cautelarmente la gestión de Eulen hasta que no se resuelva definitivamente los expedientes.
Según el Departamento, la situación sanitaria en la residencia está calificada como 'verde' y hay una situación «de estabilidad» en la gestión.
Con respecto a la Residencia Mossèn Vidal y Aunòs, donde el Departamento señala que las irregularidades llevaron el centro a una situación «de afectación generalizada» por la covid-19, la intervención y el cambio temporal de entidad gestora fue el 7 de mayo. El 3 de junio se abrió expediente sancionador a Eulen por una presunta infracción muy grave, que puede ser sancionada con multa de 7.000 euros, además de suspensión total de la prestación de servicios por un periodo de 4 años.
Además, en esta residencia el Servicio de Inspección ya abrió el 17 de marzo un expediente sancionador a la empresa en relación a los presuntos maltratos recibidos por una residente por parte de tres trabajadores del centro.