El CSIC desarrolla un nuevo test de anticuerpos con una fiabilidad del 98%
Estará a disposición de los hospitales en aproximadamente un mes y medio
Bautizado como «Kit ELISA», el test de anticuerpos para detectar la inmunidad frente a la Covid-19 que han diseñado varios grupos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas tiene una fiabilidad cercana ya al 100 por cien (supera el 98%) y estará a disposición de los hospitales en aproximadamente un mes y medio.
La nueva prueba serológica detecta esos anticuerpos y permite saber si una persona ha estado en contacto con el coronavirus SARS-CoV-2 y si su sistema inmunitario ha reaccionado.
La tecnología, que se ha presentado hoy en rueda de prensa en la sede principal del CSIC, ha sido ya validada por los servicios de Inmunología de varios hospitales (La Princesa y La Paz, ambos en Madrid), y van a ser fabricados por una empresa española (la salmantina Immunostep).
Los test serológicos, han recordado hoy en rueda de prensa los responsables del CSIC, son fundamentales para determinar quién ha contraído el virus y si está inmunizado frente a él.
El «Kit ELISA» se va a convertir, según los científicos que han participado en su desarrollo, en una de las tecnologías más fiables para la realización de test serológicos de la población, y se basa en procedimientos que ya se realizan de una forma habitual en muchos hospitales y laboratorios especializados.
Durante el confinamiento, cuatro grupos de investigación del Centro Nacional de Biotecnología trabajaron contra el crono para disponer de este tipo de test serológicos que permiten conocer quien contrajo el virus y si está inmunizado.
Ese análisis, han subrayado hoy los investigadores y los responsables del CSIC y de los hospitales, es crucial en la gestión de la pandemia, ya que una gran parte de los contagiados por el virus cursan la enfermedad sin síntomas o de una manera muy leve.
En este empeño se involucraron los grupos de los investigadores del CSIC Hugh Reyburn, Mar Valés, José María Casasnovas y José Miguel Rodríguez Frade, que consiguieron identificar una nueva proteína que funciona como antígeno y combinarla con otros antígenos virales para completar este test serológico.
«No buscábamos un test rápido; queríamos uno fiable y que nos proporcionara mucha información», ha manifestado Mar Valés durante la comparecencia.
Existen dos tipos de diagnóstico: las «PCR», que permiten saber si un paciente está contagiado por el coronavirus en el momento de su realización, y los test serológicos , que detectan anticuerpos y determinan si un individuo ha sido infectado con el SARS-CoV-2 y si su sistema inmunitario ha reaccionado frente al mismo.
Los test serológicos se realizan con muestras de sangre y detectan distintos tipos de anticuerpos (inmunoglobulinas): la IgM (inmunoglobulina M), la primera que se genera tras la infección e indica que la persona está iniciando la respuesta a la enfermedad; la IgG (inmunoglobulina G), se produce en un momento más avanzado de la infección e informa durante meses de que un individuo ha padecido la enfermedad; y la inmunoglobulina A (IgA), que se produce en estados tempranos, pero puede ser detectada también en fases tardías.
A diferencia de las PCR, el principal problema de los test serológicos -hasta ahora- es su poca fiabilidad, un problema que han resuelto los investigadores del CSIC, que ha protegido ya la nueva tecnología con una patente y la ha puesto a disposición del tejido industrial español, para evitar la dependencia de terceros países y conseguir que llegue cuanto antes a la sociedad.
Además de los «Kit ELISA», la nueva tecnología se puede producir en un formato de «tiras inmunocromatográficas» (una técnica similar a la que se emplea en las pruebas de embarazo), que también se conocen como test rápidos de anticuerpos, ya que el resultado se genera en solo 15 minutos, y el CSIC está ya negociando con varias empresas españolas la licencia de estos test en este formato para cubrir toda la demanda y a un precio económico.
El responsable de la empresa Immunostep, Ricardo Jara, se ha referido a éste como un ejemplo de lo que debe ser la colaboración público-privada y ha destacado que tras la labor de investigación pública que han llevado a cabo los científicos hay un tejido industrial que elimina la dependencia de terceros países para disponer de estas pruebas diagnósticas.
Aunque no ha precisado cuál será el precio definitivo del test, Jara si ha adelantado que será cuestión «de unos pocos euros».
Antes de comenzar la rueda de prensa intervino en el acto la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, para expresar su satisfacción por los resultados que empiezan a ver la luz tras el intenso trabajo que han llevado a cabo los investigadores durante los últimos meses.
Rosa Menéndez ha corroborado la responsabilidad que tenía el CSIC como principal organismo público de investigación español de volcarse en la búsqueda de soluciones que contribuyeran a superar esta crisis, ha agradecido la financiación extraordinaria del Gobierno y las donaciones privadas que han recibido para llevar a cabo los proyectos y ha concluido que «hoy» emergen los frutos de la excelencia de la ciencia española.