Un pueblo de Cáceres prohíbe comer pipas y chuches para evitar el virus
Tampoco se puede hacer botellón y cualquier otra actividad no autorizada que comporte aglomeración de personas en las calles
El Ayuntamiento de Deleitosa (Cáceres) ha prohibido comer chucherías y pipas en la vía pública, así como hacer botellón y cualquier otra actividad no autorizada que conlleve aglomeración de personas en las calles de este municipio de poco más de 700 habitantes, con el fin de evitar contagios y prevenir la propagación del coronavirus.
El alcalde, Juan Pedro Domingo, ha establecido estas prohibiciones en un bando municipal, «ante los rebrotes que se están produciendo últimamente, alguno en municipios cercanos», como el de la localidad de Peraleda de la Mata, con 16 positivos, y donde se ha pedido a los vecinos que salgan de casa solo lo imprescindible.
Así, ante la posibilidad de que los menores de edad «compartan» estas golosinas en la vía pública, «con el riesgo que supone», ordena que no se coman en las calles del pueblo.
«Tenemos por delante un verano atípico, cuando llega la época de reencuentros, de vacaciones, no podemos hacer aún todo lo que nos gustaría, aunque debemos aprender a convivir todos con las normas sanitarias establecidas», expone el alcalde en su bando.
De esta forma llama a la población a «extremar» la precaución, ser «responsable y cívicos» para evitar contagios, pues el incumplimiento de las medidas sanitarias «pone en peligro a todos y muy especialmente a la población de riesgo», afirma Domínguez.
En este sentido, ha recomendado a los padres con hijos menores de edad que les «inculquen cada día la necesidad de usar mascarillas y guardar las distancias de seguridad».
Además, el alcalde ya avanza que el concierto «Fitomanía», previsto el 16 de agosto en el campo municipal con motivo de las fiestas locales de Deleitosa, con aforo limitado y medidas como el control de temperatura a la entrada, puede sufrir cambios o incluso suspenderse si es necesario porque «lo primero es la salud de todos».
El ayuntamiento tiene previsto celebrar en el mes de agosto un funeral por las víctimas del coronavirus y recordarlas con una placa en el cementerio, «si la situación sanitaria lo permite», concluye el bando.