Los expertos proponen estrategia integral para «mejorar» la lucha contra la covid
Entre otras cosas apuestan por al menos un rastreador por cada 4.000 o 5.000 habitantes
Una treintena de expertos consideran que la estrategia actual basada «exclusivamente» en la «convivencia» con el coronavirus es «mejorable» por lo que han planteado una complementaria, que entre otras cosas apuesta por al menos un rastreador por cada 4.000 o 5.000 habitantes y sobre todo, por la prevención.
Entre los expertos que firman el documento «#unaestrategiaintegral» se encuentran médicos, virólogos, epidemiólogos, microbiólogos y economistas españoles como Adolfo García-Sastre, Miguel Sebastián, Santiago Moreno, Juan José Badiola o César Carballo, entre otros.
Tiene como objetivo contribuir en «la consecución de una gestión eficaz» con una serie de propuestas -que pueden ser complementarias- basadas en la detección predictiva, marcando «como diana de estudio» a cualquier persona antes de que pueda o no manifestar síntomas.
Contiene cinco recomendaciones clave: sobre el uso de mascarilla, distanciamiento e higiene de manos; sobre detección precoz; sobre el uso de la tecnología; sobre la realización de las pruebas PCR; y sobre actividades complementarias de prevención de la infección.
En cuanto a la detección, concreta que la unidad territorial en la que se basa es la zona básica de salud, pudiéndose considerar como tal el área sanitaria, coordinada por una nueva Agencia Estatal de Salud Pública en cogobernanza con las comunidades.
Estima que en España se debe cumplir el ratio de al menos un rastreador por cada 4.000 o 5.000 habitantes.
Aconseja que se trate de voluntarios formados «no sustraídos» del sistema de salud y la contratación de personal en paro.
También defiende el estudio de las aguas residuales/fecales «de manera semicontinua» -continuas, y automáticas en la medida de lo posible, en días alternos-, sectorizadas por barrios o cuencas de saneamiento para que, «de forma efectiva y precoz, se puedan detectar fragmentos genómicos y estimar la carga viral probable en dicho sector».
Otra de las recomendaciones que consideran importantes los firmantes de la estrategia es la de asegurar la capacidad de realización de PCR y pruebas serológicas: Contar con una capacidad suficiente de pruebas para hacer controles masivos.
Propone la creación de un dispositivo rápido de intervención para cribaje masivo por PCR -cuando la pandemia se encuentren una determinado punto- liderado por Sanidad en consenso con las autonomías, y en el que los expertos aconsejan «la participación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado».
En cuanto a las mascarillas, sostiene que mientras haya focos de transmisión comunitaria en el país su uso «debe ser universal, con obligación de llevarla en cualquier espacio público».
Concreta que si la incidencia acumulada -casos diagnosticados en los últimos 7 días por 100 mil habitantes- es menor de diez en la comunidad, estará recomendada en espacios públicos abiertos, donde se garantice una distancia mínima de metro y medio entre personas, pero obligatoria en cerrados.
Si la incidencia acumulada es mayor de diez, la mascarilla será obligatoria tanto en espacios abiertos como cerrados.
Para los expertos urge una aplicación de rastreo para lograr al menos que un 60 % se la descargue.
Implementar el control y desinfección de espacios públicos, sobre todo en las zonas básicas de salud con aumento de casos o degradación de los indicadores cuantitativos propuestos y la publicidad y campañas de información y concienciación periódicas, especialmente dirigidas a los jóvenes, son otras de las recomendaciones que destaca el documento.