Entre 2.000 y 2.500 docentes de Madrid tienen que someterse a una PCR después de dar positivo en los test

El consejero de Educación y Juventud de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, ha cifrado «entre 2.000 y 2.500» a los docentes que tienen que someterse a una PCR después de dar positivo en alguno de los más de 66.000 test serológicos programados por la Comunidad antes del retorno a aulas. Si finalmente dieran positivo en coronavirus con los test que han empezado a realizarse este sábado serían sustituidos por interinos, adicionales a los 10.610 profesores que la Comunidad tiene previstos contratar.

Así lo ha confirmado Ossorio después de visitar el albergue juvenil de los Batanas, en Rascafría, donde ha conocido el estado de los trabajos de investigación arqueológica que se están desarrollando en los yacimientos de Pinilla de la Vall. Hasta el momento se han realizado 66.000 pruebas entre los 72.000 docentes convocados. Eso supone, en palabras del consejero, que está acudiendo «el 90 por ciento» de los docentes, cosa que «satisface» a la Comunidad.

«Cuántos más vayan, más seguridad», ha resumido. Una vez más, Ossorio ha pedido disculpas por las colas del primer día, cuando «hubo gente que tuvo que esperar muchas horas» aunque el resto de jormadas ha discurrido «con absoluta normalidad».

El titular de Educación ha descrito como un «reto complicado» la práctica de estos test entre la comunidad educativa -no circunscrita a los docentes sino ampliada en personal administrativo o al personal de los comedores- dado que «se incorporaron de sus vacaciones el martes pasado». Y lo han hecho «sin escatimar recursos».

Docentes adicionales

Ossorio ha indicado que entre el viernes y el sábado se ha procedido a la asignación definitiva de los docentes adicionales en los centros. Será el lunes cuando la Comunidad examine las bolsas de interinos conociendo exactamente a los profesores que van a cada centro, «de manera que el martes ya puedan acudir al centro educativo, cuando empiece el curso». El titular de Educación ha puntualizado que el grosor de los 10.610 profesores adicionales se incorporarán ahora.

Además la Comunidad realizará pruebas en grupos de riesgo, igual que a los profesores que ahora se incorporarán. «Ya alguno de los cuales se les había llamado el jueves y el viernes fueron a hacerse las pruebas», ha indicado.

20 alumnos

El consejero ha remarcado que ya en primeros de julio se puso sobre la mesa la necesidad de una vuelta en las aulas presencial y si era necesario con un escenario 2, que supone la reducción de la ratio de las clases con un tope de 20 alumnos por aula, instrucción «ya trasladada a los docentes» en aquellos días.

Ossoro reconoce que «es complicado» rebajar ratios cuando en Madrid estaba en los «25, 30, 35 alumnos». Para eso los centros educativos están buscando espacios adicionales en sus instalaciones. De no encontrarlas podrán echar mano de los espacios que están poniendo a disposición los ayuntamientos a la Comunidad.

El consejero también ha incluido la adquisición de 260 módulos prefabricados en una primera fase, unido a la opción de instalar mamparas individuales para los alumnos.