Sanidad
Se dispara el interés por los servicios que hacen tests de antígenos a las empresas mientras las pruebas no lleguen a la farmacia
La demanda sube exponencialmente desde que estas pruebas se homologaron, con incrementos de hasta un 400%
Cada vez notamos que hay más empresas que están intentando hacerse con este tipo de test. Hay una demanda creciente y bastante importante, sobre todo en empresas que tienen una actividad esencial y con mucha concurrencia de trabajadores», ha explicado César Sánchez, director de la oficina de prevención de riesgos laborales de Fomento del Trabajo. Empresas sociosanitarias, mercados, centros comerciales, polígonos industriales, compañías aéreas o sectores que sufrieron brotes en verano como mataderos son algunos de los ámbitos que han mostrado más interés por estas pruebas, según Sánchez.
Por ejemplo, Fluidra fue una de las primeras compañías a hacer este test a trabajadores que han sido o sospechan que han tenido contacto estrecho con un positivo. La multinacional con sede en Sabadell lo hace a través del servicio de vigilancia Quirón-Prevención tanto en lugares «especialmente habilidades» en los centros de trabajo como en las instalaciones hospitalarias. «No tenemos almacén propio, todo funciona a través de Quirón-Prevención. Cada vez que hemos requerido un test el servicio ha sido rápido y sin problemas», ha afirmado el grupo especializado en construcción y mantenimiento de piscinas y complementos.
Las empresas tienen dos opciones para hacer los tests de antígenos, comprarlo directamente por un precio de entre 4 y 6,5 euros o contratar los servicios de una empresa sanitaria que te ofrece la mano de obra del facultativo que hará la prueba y lo analizará, cosa que hace aumentar el coste por unidad a entre 30 y 45 euros. «Ahora mismo las empresas que ofrecen el test y el trabajo del sanitario tienen mucho trabajo porque, de hecho, es más costoso el trabajo del sanitario que el precio del propio test», explica la miembro del consejo ejecutivo de la Cámara de Comercio, Montse Soler.
«Si tienes que desplazarte el coste sale más caro pero las empresas están dispuestas. Hoy por hoy estamos colapsados y nuestra dimensión está superada por el número de gente que nos pide hacer tests», asegura Leo Martínez, director de marketing y adjunto a la dirección general de Mutuacat. La mutua ha participado en las pruebas a los polígonos industriales que ha organizado Pimec en las últimas semanas. Puede ofrecer un precio más competitivo que las empresas sanitarias, y piden 25 euros para hacer el test a los mutualistas. El 70% de sus clientes son emprendidas y sobre todo han notado incremento de peticiones de compañeras pequeñas.
Algunas de estas compañías que hacen los tests'a domicilio' son empresas que se han reconvertido durante la pandemia. Una de estas es HM International, que antes de la covid-19 se dedicaba a la gestión de pacientes extranjeros. Aunque no pueden ofrecer los tests a un precio tan bajo como las mutuas, han notado un incremento de la demanda últimamente. Por ejemplo, en tres días han cerrado tratos con 20 empresas para hacer tests de antígenos.
Más exponencial ha sido el cambio de que ha notado la biotecnológica Blueberry Diagnostics, que ha visto cómo la demanda de los tests de antígenos subía un 400% en las últimas semanas. Sus clientes son empresas que los quieren utilizar para uso interno –para los trabajadores- y de otros que también les necesitan para los clientes, principalmente odontólogos. Además, la compañía se encarga de hacer los tests rápidos en los tres puntos que la Cámara de Comercio ha habilitado en Granollers yBarcelona por un coste de 29,95 euros. Los resultados de las pruebas se entregarán con un certificado digital que es válido durante 7 días. A principios de semana, la empresa explió a laACN que tenían 20.000 unidades en stock, una cantidad que sólo les serviría para una semana. «La demanda superará la oferta en breves, si no lo ha hecho ya», ha explicado un portavoz de la compañía.
La pandemia también ha modificado la razón de ser de Kwan, una consultora de nueva creación que desde hace unos meses también hace tests de antígenos. También han llegado a un acuerdo con una patronal, en este caso, Pimec, para llevar los tests rápidos a las empresas que lo pidan después de haber hecho pruebas en diferentes zonas industriales durante la semana. El último cribado se hizo a Sant Fruitós del Bages, donde se hizo la prueba a 231 trabajadores de 21 empresas diferentes. En estos puntos de testeo, Kwan se encarga de organizar la logística y coordinar al personal de enfermería y los administrativos para hacer los tests, enviar los resultados, y asegurarse de que se tiene el consentimiento informado. En las últimas semanas, esta compañía ha notado que sus teléfonos no paraban de recibir llamadas. «La demanda crece, nos han pedido del viernes para el lunes testar toda la plantilla de una empresa de más de 70 trabajadores o hacer pruebas para hacer un acto de 150 personas antes de entrar. Todo eso es nuevo», asegura un portavoz de Kwan.
Según Fomento y la Cámara de Comercio, a pesar del aumento de la demanda no ha habido un crecimiento de los precios de los tests de antígenos. Además, a pesar de estas cifras de incremento, los representantes de los empresarios consideran que el cambio de las últimas no es lo bastante grande teniendo en cuenta las ventajas que tienen estos tests.
Los empresarios consultados por la ACN coinciden al valorar que la situación actual se trata de un pico de demanda que se apaciguará cuando los tests se hagan más accesibles, bien porque se flexibiliza su compra o llegan a las farmacias. Por ejemplo, Mutuacat está valorando si contratar más personal o no para dar respuesta a las peticiones que reciben. «Creemos que se trata de un boom, ahora mismo nos piden que vayamos a hacer tests, pero llegará un momento que la gente se lo hará a ellos mismos», ha afirmado su director de Marketing. Una opción para poder hacer este «cribado masivo» en las empresas» sería formar al representante de prevención de riesgos laboral para hacerlos.
«Cuando Sanidad empiece a hacer el test de antígeno de una forma semipública o totalmente pública no deja lugar para que lo hagan las empresas. Ahora si el Gobierno no hace eso dentro de un tiempo habrá mucho más comercio de estos tests», ha dicho la miembro del consejo ejecutivo de la Cámara de Comercio, Montse Soler; que ve «inconcebible» que estas pruebas no sean en las farmacias, que ya centralizan otras pruebas como las del cáncer de colon. «Es inexplicable que no lo hagan ya. No se entiende», insiste.