Negocios
Preocupación entre el sector de la peluquería y la estética a las puertas de una Navidad atípica con menos clientes
Los profesionales reivindican los centros de belleza como espacios seguros y animan a la clientela a no descuidar la imagen
Aunque reconoce que no les queda otra que «aguantar y dar el mejor servicio», Salcedo calcula que en torno a un 40% de peluquerías cerrarán si no se les rebaja la presión fiscal. Por esta razón, pide la reducción del 21% del IVA a fin de que el sector lo pueda «repercutir» en los precios y ser más competitivos. Asimismo, remarca que sus locales, como los de los centros de estética, son «seguros» y considera que ha sido muy «injusto» el cierre de estos establecimientos.
De hecho, la presidenta la Asociación de Esteticistas Tarraconense, Tere Rubio, señala que las profesionales están muy «desesperadas y angustiadas» porque trabajan muy poco. A diferencia del primer cierre, cuando la clientela respondió, ahora el escenario es otro. La gente tiene miedo por su situación económica, la mitad no pedirá cita porque no puede salir; las Navidades no serán como hasta ahora; si no te puedes juntar con los tuyos, tienes otros ánimos», afirma. Además, denuncia que las ayudas prometidas por las administraciones han llegado con cuentagotas y tilda «de injusto» el segundo cierre de los centros.
Mònica Garcia, propietaria de una peluquería en Valls, certifica que los negocios están sufriendo las consecuencias económicas derivadas de la crisis sanitaria. Explica que el trabajo «ha aflojado muchísimo» y se pregunta: ¿Si no puedes salir, por qué te tienes que arreglar y peinar? Es un pez que se muerde la cola; un cambio muy bestia». Eli Expósito, responsable de un centro de estética, explica que han trabajado bastante desde la reapertura de los negocios. Han podido reprogramar la mayoría de las citas perdidas, en buena parte por haber mantenido unos precios competitivos.
El esteticista defensa que sigue a rajatabla los protocolos sanitarios y reivindica que las estéticas son espacios seguros. «Esperamos tener más trabajo, no creo que la gente tenga que tener miedo a hacerse los servicios de siempre; esperamos que la gente se arregle aunque sea para estar en casa y con los de casa porque tenemos que empezar el año con fuerza,» concluye Expósito.