Los sindicatos protestarán el 11 de febrero para que el gobierno reanude las reformas paro

«La movilización tiene como objetivo lanzar un mensaje nítido al gobierno: una vez acabada la negociación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) queremos fechas y mesas de diálogo para corregir las reformas laborales», ha añadido.

En este punto, CCOO y UGT piden reanudar el diálogo que quedó «anclado en febrero con trabajo muy adelantado» para «recuperar el valor de la negociación colectiva», blindar la estabilidad del empleo, dificultar los despidos, mejorar la flexibilidad interna para que «echar a un trabajador sea la última opción» de las empresas y regular el uso «nocivo» de la subcontratación.

Las dos organizaciones han alertado el «peligro» de que «se instale una retórica» sobre las condiciones que impone la Unión Europea que lleven a no llevar a cabo políticas progresistas. «Estamos hartos que se utilicela UE como excusa permanente», ha subrayado Álvarez.

Por eso, han reclamado al gobierno de Pedro Sánchez un «debate real». En el caso del SMI, el secretario general de UGT ha recordado que los sectores afectados por la medida no han estado especialmente afectados por el paro de actividad a raíz de la covid-19, ya que tendrán que asumir el incremento de la renta mínima serán la agricultura o servicios públicos subcontratados, entre otros.

«Ni la hostelería, ni el comercio, ni una parte importante del sector servicios estarán afectados por el aumento del SMI», ha dicho Álvarez. «El gobierno tiene que subir el SMI durante el 2021 y lo tiene que hacer cuanto antes mejor», ha insistido, en la misma línea, Sordo. De momento, los dirigentes sindicales no han percibido cambios en la posición el ejecutivo español, que está dividido entre PSOE y Podemos por el aumento de la renta mínima.

Con respecto a las pensiones, UGT y CCOO ven necesario «volver al 2011», derogar la reforma del PP del 2013 y, partiendo de esta base, buscar modificaciones que hagan sostenible el sistema. Álvarez ha pedido tener en cuenta que la Seguridad Social «tiene un problema de ingresos y no gastos» y que España «es uno de los países que menos gasta en pensiones» en Europa.

Los sindicatos también han criticado el gobierno de coalición para conceder «derecho a veto» a la patronal, permitiendo que se retrasen las negociaciones para subir salarios y derogar la normativa laboral y del sistema de pensiones. «No se puede volver a enviar el mensaje que si no hay acuerdo social no se toca nada porque eso es apostar por el bloqueo», ha indicado el líder de CCOO.

Las concentraciones del 11 de febrero se harán delante de las subdelegaciones del gobierno en cada territorio en un formato «muy limitado» porque los sindicatos no quieren poner en riesgo a los trabajadores pidiendo que protesten en plena pandemia. Por eso, han animado a todo aquel que lo quiera a mostrar «hasta qué punto hay indignación social» al Estado ante la falta de respuestas del gobierno español con mensajes en las redes.

Según han explicado, las movilizaciones se mantendrán aunque los documentos de reformas estructurales que el gobierno español tiene que enviar a Bruselas, que son el de las pensiones y la reforma laboral- concuerden con lo que quieren los sindicatos. «Más allá de lo que envíen, nosotros mantendremos las movilizaciones porque hay temas de fondo muy importantes y es el momento idóneo porque una parte de la sociedad que ha estado trabajando de forma abnegada durante la pandemia quiere que el gobierno conozca su voz y sus reivindicaciones», ha dicho el secretario general de UGT.