Judicial
Acepta 8 años de cárcel por violar a una mujer en Figueres y dejarla atada a un somier
El procesado ha reconocido los hechos y le han aplicado una atenuante de drogadicción
El procesado y la víctima coincidieron saliendo de fiesta en Figueres y decidieron ir hasta un huerto propiedad del acusado. Allí, siguieron tomando alcohol y drogas. Según ha dicho el acusado al juicio, durante la noche consumieron pastillas, bebidas alcohólicas y «cocaína, mucha cocaína:» «Entre todos quizás nos tomamos entre diez y quince gramos».
Cuando la víctima dijo que se marchaba a casa, el acusado le dijo «cómo me dejarás así» y, con el objetivo de atemorizarla, le clavó un «golpe fuerte» en el pómulo derecho, la sujetó por la cabeza y la empujó para obligarle a hacer una felación. Después, la cogió por los brazos e intentó penetrarla.
«La víctima se resistió diciéndole en todo momento que no quería mantener relaciones sexuales», expone el escrito de acusación que relata que «el acusado desistió de volver a intentar penetrarla pero cogió un tarro de pimienta y se lo introdujo por la vagina».
Después de la agresión sexual, y para impedir que la víctima escapara y pidiera ayuda, la llevó hasta una habitación de la finca y la ató por las muñecas y por la cintura a un somier con cinta aislante negra. El procesado huyó del lugar de los hechos.
La víctima estuvo retenida hasta que consiguió liberarse e ir a pedir auxilio a un hombre que estaba trasteando a un huerto del lado. El vecino alertó a los servicios de emergencias, que atendieron a la víctima y acabaron deteniendo el ahora acusado.
El procesado es un viejo conocido de la policía y acumula numerosos antecedentes. Su abogada, Natàlia Frigola, ha presentado documentación que acredita que al menos desde el año 2017 tiene diagnosticado un trastorno por drogadicción.
Como ha admitido los hechos y ha quedado acreditado que en el momento de los hechos estaba afectado por el consumo de alcohol y drogas, la fiscalía ha modificado el escrito de conclusiones provisionales aplicándole una atenuante de drogadicción. La acusación pública solicita ahora 6 años de cárcel por la agresión sexual, multa de 720 euros por el delito de lesiones y 2 años de prisión por detención ilegal. La defensa se ha adherido a la petición.
En el último turno de palabra, el procesado ha dicho que está de acuerdo con la pena y que reconoce los hechos, pero ha cuestionado a la presidenta del tribunal de la sección cuarta «como se puede condenar alguien sin pruebas». El juicio ha quedado visto para sentencia.