Policial
Desarticulada una banda internacional que robó un diamante millonario en Barcelona
El grupo se movía por Francia, Suiza, Dubái y Valencia estafando vendedores con el método «Rip Deal»
La investigación de los Mossos d'Esquadra permitió identificar a la autora material del robo, que simulaba ser experta en diamantes y su pareja, cuyas huellas dactilares se pudieron recuperar de la caja, que fueron localizados en Besançon, al este de Francia. También al tercero investigado, que simuló ser el comprador y que resultó ser el punto de conexión entre las investigaciones de Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional.
Orden Europea para investigar la organización criminal
Ante estos hechos y ante la sospecha de que las tres personas formarían parte de una organización criminal dedicada a cometer esta tipología de estafa por toda Europa, se estableció un equipo de investigación conjunta entre ambos cuerpos policiales. De esta manera en junio de 2020 se instó a la autoridad judicial española a la emisión de una Orden Europea de Búsqueda dirigida a las autoridades francesas con la finalidad de poder investigar a los identificados como autores del hurto del diamante en Barcelona.
En la Orden Europea de Búsqueda, los policías solicitaron intervenciones telefónicas en Francia, gracias a las que se pudo comprobar que los autores del hurto en Barcelona formaban parte de una organización criminal dedicada, entre otras actividades, a cometer estafas por el método del «Rip Deal»en toda Europa.
Mediante Eurojust, el equipo de investigadores mantuvo reuniones de coordinación entre autoridades judiciales y policiales españolas, francesas y suizas. Este hecho permitió obtener indicios que relacionaban la organización investigada con más delitos, como una estafa cometida en la ciudad suiza de Zurich el 31 de julio de 2020, dondeun coleccionista de vehículos antiguos le robaron la suma de 200.000 francos suizos en billetes de 1.000 francos, o el hurto de un diamante de 101 quilates valorado en 4,5 millones de euros, también por el método del «Rip Deal», cometido en un hotel de la localidad francesa de Cannes el 7 de agosto de 2020.
El 15 de octubre de 2020 miembros de la organización se desplazaron a Valencia con intención de cometer otra estafa por el mismo método, aunque finalmente no se produjo ya que no se produjo el encuentro entre la víctima y los investigados.
Durante la investigación se tuvo conocimiento de varios intentos de vender los diamantes sustraídos, así como de un posible viaje a Dubái también con la intención de vender uno. Todas estas gestiones de los investigados resultaron infructuosos.
La investigación demostró la existencia de una organización muy profesional. Sus actividades delictivas les proporcionaban resultados muy lucrativos, hecho que les permitió especializarse en la comisión de estafas por el método del «Rip Deal». Para cometer los delitos hacían uso de una bolsa de doble fondo muy específica y un facsímil que les servía para engañar a las víctimas. Estaban bien entrenados y experimentados en esta actividad delictiva y buscaban potenciales víctimas casi a diario.
Operativo que impidió la venta de uno de los diamantes sustraídos
Recientemente, y ante la sospecha de que pudiera producirse una cita con la finalidad de vender uno de los diamantes sustraídos se llevó a cabo un operativo policial por parte de la Policía Judicial francesa. El dispositivo posibilitó que se hicieran varios cacheos domiciliarios y detenciones en diversos localidades de Francia.
En uno de los cacheos se encontró una maleta rosa similar en todos los aspectos a la utilizada durante el robo del diamante enCannes, así como sobres que contenían trozos de papel en forma de billetes de banco (facsímiles), de los que se utilizan normalmente para la práctica de estafas por el método del «Rip Deal».
Además de las ocho detenciones y de los tres cacheos domiciliarios, esta intervención policial conjunta ha comportado la intervención de 10.000 euros en efectivo, dos certificados de joyas, documentación relacionada con la compra de una vivienda en Rumania, una lupa dedicada al uso de joyería y una memoria USB que permitía el acceso y las transacciones a una cartera de criptomonedas, además de la maleta utilizada durante el robo de Cannes y el sobre con los trozos de papel en forma de billetes.