La sorprendente reacción de una mujer a quien reclaman que se ponga mascarilla
En la cola de un supermercado, en Sudáfrica, la cliente improvisó una mascarilla con su tanga
No todos los países están aplicando medidas estrictas para afrontar la pandemia del coronavirus. De hecho, todavía hay dirigentes que, a pesar de los millares de muertos que se registran diariamente, todavía cuestionan adoptar restricciones duras, como es el caso del Brasil.
A estas alturas, sin embargo, a casi todas partes hay indicaciones de mínimos para luchar contra el coronavirus y una de ellas es el uso de las mascarillas, de las cuales sólo reniegan los negacionistas. Usar la mascarilla en actividades públicas ya es una circunstancia generalizada, pero todavía se producen conflictos y, también, situaciones inesperadas.
Un ejemplo es el que ha empezado a circular por las redes sociales y que se produjo en un supermercado en Sudáfrica. Una mujer fue a comprar sin utilizar mascarilla y cuando estaba en la cola de la caja, una trabajadora del centro le llamó la atención.
Normalmente en estos casos habría que esperar algún tipo de discusión donde se exponen argumentos difícilmente defendibles por los que no llevan la mascarilla. Pero en este caso no fue así. La mujer reaccionó rápidamente, a pesar de que de una manera bien curiosa.
La mujer se quitó las bragas en aquel momento y se las puso en la cabeza utilizándolas como mascarilla improvisada. ¿«Eres feliz ahora»? Es lo que le dijo la mujer a la trabajadora del supermercado ante unos clientes que no esperaban encontrarse en una situación parecida.
La trabajadora respondió: «Bien, personalmente lo encuentro aceptable. Al fin y al cabo es una máscara. Y la verdad, creo que las bacterias de tu tanga son menores que en la mascarilla. Bien hecho, brillante».