El Boletín Oficial del Estado(BOE) ha publicado este sábado el Decreto ley con el paquete de ayudas de 11.000 MEUR para empresas, pymes y autónomos afectados por la crisis de la covid-19. Dentro de este paquete, 7.000 MEUR son ayudas directas que gestionarán las comunidades autónomas (2.000 millones serán para las Baleares y las Canarias y 5.000 se repartirán entre el resto de autonomías). El BOE detalla en el suyo redactado los 95 sectores económicos que pueden acceder a las ayudas directas: bares, restaurantes, comercios, cines, gimnasios, locales de apuestas, transporte, hoteles y alojamientos turísticos, empresas de alquiler o agencias de viajes. No obstante, el sindicato ATA denuncia que no aparecen las peluquerías y los centros de estética.
«Publicado el Real decreto Ley de ayudas directas aprobadas por el gobierno ayer. Hay olvidos injustificados de sectores de autónomos y empresas que se han visto muy afectadas por restricciones y limitaciones de actividad. Entre otros, las peluquerías y los centros de estética», ha señalado al presidente de ATA, Lorenzo Amor. «Lucharemos por su inclusión», ha continuado Amor. Otros sectores económicos también se han quejado para no verse incluidos dentro de las 95 actividades con derecho a acceder a los 7.000 MEUR de ayudas directas. Es el caso de los agentes comerciales (CNAE 4619), la limpieza de apartamentos turísticos (CNAE 8110), o el comercio minorista de productos cosméticos e higiénicos en tiendas especializadas (CNAE 4775).
Máximo 200.000 euros y mantener la actividad hasta junio del 2022
Las empresas y autónomos podrán recibir entre 4.000 y 200.000 euros, mientras que los trabajadores por cuenta propia que tributen por módulos podrán recibir un máximo de 3.000 euros. Podrán acceder a las ayudas directas del fondo las compañías que hayan tenido una caída de ingresos de al menos el 30% con relación a 2019 y servirán para cubrir hasta el 40% de la caída adicional de ingresos de micropymes y autónomos (con hasta 10 trabajadores) y del 20% para el resto de empresas. Las ayudas serán no reembolsables y servirán para cubrir la caída de ingresos, cubrir gastos fijos pagar proveedores o deudas que se hayan contraído entre marzo de 2020 y mayo de 2021.
Para acceder al paquete de ayudas, las empresas tendrán que mantener la actividad hasta el 30 de junio de 2022 y no podrán repartir dividendos ni aumentar retribuciones de la alta dirección en dos años.