Un nuevo coronavirus puede estar contagiándose de perros a humanos
Expertos de los Estados Unidos lo detectaron en Malasia
Poco después de que la pandemia de COVID-19 estallase en la ciudad china de Wuhan y paulatinamente el SARS-CoV-2 se propagase por todo el mundo, el profesor de la estadounidense Universidad de Duke Gregory Gray encargó a uno de sus estudiantes que desarrollase una prueba capaz de detectar todas las especies de coronavirus con la finalidad de prevenir una futura catástrofe.
El objetivo era, una vez probada la fiabilidad de la herramienta, utilizarla en muestras humanas antiguas para localizar signos de coronavirus que pudieran haber pasado de animales a humanos, como se sospecha que ocurrió con el SARS-CoV-2.
El resultado: descubrieron en Malasia un coronavirus que parecía haber saltado de perros a humanos. Este hallazgo lo lograron al analizar hisopos nasales antiguos correspondientes a 301 personas en Sarawak, la mayoría de ellos niños, ingresados entre 2017 y 2018 con neumonía. En ocho de estos pacientes (2.7%), encontraron rastros de ARN de un virus de este tipo de origen canino, según publicaron el pasado jueves en la revista Clinical Infectious Disease.
Tras emplear otro tipo de pruebas más convencionales para confirmar estos descubrimientos, detectaron el virus en dos de los pacientes. Tras secuenciarlo, lo identificaron como una nueva mezcla recombinada de coronavirus canino y felino, nunca antes documentado.
Como explican los investigadores, esta es la primera vez que se registra una recombinación de coronavirus con origen en perros y gatos en pacientes con neumonía. «Si se confirma como un patógeno, se convertiría en el octavo conocido en provocar una enfermedad en las personas», recalcan, aunque insisten en que su hallazgo necesita de una investigación más profunda.
Además, resaltan que este recién descubierto coronavirus comparte muchas características genómicas con el que ha causado la pandemia de COVID-19.
No obstante, advierten de que el estudio tiene una serie de limitaciones, como el hecho de no haber cumplido con los conocidos como Postulados de Koch, una lista de requerimientos muy estrictos para poder validar la existencia de un virus y una enfermedad. Asimismo, reconocen que el coronavirus detectado podría simplemente encontrarse en las vías respiratorias de los pacientes sin ser la causa de la enfermedad.
Necesarios más estudios
Los investigadores denuncian, además, que los coronavirus «no se han estudiado suficientemente» durante años, pues se ha asociado en muchas ocasiones con el resfriado común. Asimismo, se refieren en concreto a los que proceden de perros y gatos y lamentan que se han analizado «escasamente».
En este sentido, alertan de la capacidad de este tipo de virus para evolucionar rápidamente a través de «frecuentes eventos de recombinación e inducir una enfermedad de gravedad variable».
«Es aún más preocupante si se tienen en cuenta estos datos que indican que el coronavirus circulante puede ser ya transmisible a los humanos», añaden, en referencia al que acaban de identificar en Malasia.