Sociedad
Denunciado un religioso por abusos a un alumno menor de edad de Esplugues de Llobregat en 1989
El hombre ya tiene una condena de 23 años por otros abusos a menores cuando gestionaba un cine del Masnou hace diez años
El abusador nunca más intentó acercarse al chico hasta que hace unas semanas le contactó por Facebook. Intentó mantener una conversación normal, interesándose por sus hijos y otros excompañeros de clase. De hecho, lo invitó a un circuito termal para «relajarse». El denunciante asegura que eso le hizo explotar e insultó al religioso recordándole los hechos de hace 32 años. Además, buscando por internet encontró la sentencia contra el hombre por el caso del Masnou. El hombre denunció el caso a los Mossos el viernes pasado, según ha podido confirmar ACN, aunque seguramente los hechos están prescritos.
La Audiencia de Barcelona condenó en 2019 a 23 años y ocho meses de prisión Lluís G.M. por, durante años, abusar sexualmente de varios menores de edad que trabajaban repartiendo publicidad del cine. El hombre cometió los abusos entre el 2007 y el 2011, según los magistrados. Aunque él negó los hechos, las declaraciones de las víctimas y las numerosas pruebas encuentros en su domicilio y en una sala del cine, como restos de ADN, un lubricante y otros, llevaron a su consideración de culpable.
Según el tribunal, en 2005 contrató a un chico de 14 años y durante el 2008 llevó al joven y a un amigo de este a cenar en Barcelona y después en un piso suyo de Sant Just Desvern (Baix Llobregat). Contrató a una prostituta que inicialmente tuvo relaciones sexuales con el amigo del menor. Después lo hizo con este joven y finalmente fue el empresario el que hizo una felación al menor sin que este inicialmente lo viera ni lo consintiera.
Aprincipios de2007 contrató a un chico de 13 años con una discapacidad intelectual del 34%, a quien le ofreció pagar más dinero si mantenía relaciones sexuales, cosa que el chico consintió en numerosas ocasiones. En el 2010 este chico, junto con tres amigos más fueron al cine para hablar con el gerente y uno de ellos gravó la conversación para exigirle dinero a cambio de no revelar su contenido.
En agosto del 2010 contrató a otro chico de 13 años con TDAH y dislexia, y el primer día de trabajo le preguntó si era homosexual, le enseñó fotografías eróticas y le hizo tocamientos hasta que le hizo una felación a cambio de cuatro invitaciones para el cine. El acusado hizo lo mismo hasta siete ocasiones hasta junio del 2011.
En mayo del 2011 un amigo de una víctima anterior también fue contactado por el acusado, que le hizo la misma oferta de sexo a cambio de dinero, cosa que el chico, de 17 años, rehusó.